“Tranquila o te mato al niño”, le gritaron otra vez en medio de uno de los tantos raptos de desesperación, publica el periódico Escambray, de Sancti Spíritus, en un inusitado reportaje sobre el aumento de la violencia delictiva en la región.
Los investigadores tenían, dice la prensa, "solo una información: cuatro ciudadanos con varios equipajes y bultos y con un inconfundible acento oriental". Los ladrones habían degollado a los perros, y hacía meses que se dedican a asaltar a los propietarios de paladares en la zona.
Diana Carmona Peláez, relata el diario, supo que el insistente ruido de cristales rotos no era un sueño. “Estate tranquila”, le advirtió aquella voz desconocida de acento oriental que la hizo volver a entrar al cuarto, prender la lámpara de noche y despertar a Herman Frauenschuh, su esposo, para confirmarle lo que ya presentía: “Ladrones”, le dijo.
Pero antes de poner un pie en la Casa del Espagueti, como se nombra el paladar particular que el matrimonio tiene allá en la antigua carretera de El Jíbaro y donde viven con su hijo de seis años, aquellos hombres ya habían degollado los perros y hasta roto los sensores para poder ir entrando de uno en uno con el mayor sigilo. Eran, aproximadamente, las tres y treinta de la madrugada del pasado domingo 17 de mayo.
“Entre dos aguantaron a mi esposo y le pusieron un cuchillo en el cuello —narra Diana ahora que el robo es ya una historia para contar—. El niño dormía en ese momento, pero parece que elinstinto me dio por irle para arriba a uno de ellos a darle patadas, golpes y entonces mandó a que otro cogiera al niño y le pusiera el cuchillo en el cuello. Fue cuando le arrebaté al niño y le quité la máscara”.
Luego de 15 hechos delictivos que desde inicios de año han mantenido en vilo la cabecera espirituana, el pasado 29 y 30 de junio fueron detenidos los presuntos principales autores.
Los detenidos son: César Julio Martínez Figueredo, Yoannys Escriba Márquez y Luis Miguel Chacón Salcedo, porque Yordan Torres González —que horas antes también había participado en el robo del paladar de La Rotonda— logró darse a la fuga, pero arrestado en Las Tunas, donde reside.