Los estudiantes cubanos que cursaban estudios en el Miami Dade College (MDC), bajo el programa Somos un solo pueblo (SUSP) y decidieron quedarse a vivir en los Estados Unidos son San Miguel Molina, Alejandro Cuello y Aleidis Catá.
Los tres eran parte “de los diecisiete que conformaban el grupo inicial”, del cual catorce ya han regresado a Cuba, dijo la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FHRC) en un comunicado emitido el pasado jueves 7 de julio en Miami.
San Miguel Molina dijo a martinoticias.com que decidió quedarse producto a una decepción con personas de FHRC luego de un penoso incidente: “Cuando tomaba repasos para un examen, salí un día a tomar un café, y algunos de los trabajadores de la fundación que estaban en el lugar, no me permitieron volver a ingresar a donde se estaba impartiendo la clase, y esto trajo como consecuencia que me dijeran que como yo no quería hacer el examen, debía regresar a Cuba en algo más de una semana”, señaló.
Molina es miembro de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) al igual que su padre, Rafael Rodríguez Molina, uno del medio centenar de presos políticos de esa organización del oriente de Cuba.
El joven, quien cursó los primeros años de la carrera de Medicina en Santiago de Cuba, explicó que el temor a ser encarcelado por sus actividades opositoras influyó también en su decisión de radicarse en Estados Unidos.
El reembolso
El parte de prensa de FHRC asegura: “Al inicio del programa, todos los participantes se comprometieron a regresar a Cuba al finalizar el curso. Los estudiantes estuvieron de acuerdo en que si incumplían su promesa, tendrían que devolver todos los fondos invertidos en sus estudios”.
En la entrevista con martinoticias.com Molina confirmó que les comunicaron del compromiso pero únicamente de manera verbal.
“No existe ningún contrato firmado ni nada legal que diga que tenemos que entregar ese dinero”, sin embargo añadió que está dispuesto a pagar el monto total “con el tiempo debido y según mis ingresos”.
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En referencia a los conocimientos adquiridos y la efectividad del curso en sus vidas, Molina elogió la labor educativa del MDC.
“Es un curso donde aprendí, básicamente, principios de negocios, Computación, Psicología… es una institución de mucho prestigio. Pero desde el primer momento yo quisiera que se fuera claro con los estudiantes que vengan, porque cuando vine pensé algo y no era eso, pensé que era una carrera universitaria y el primer día nos reunieron y dijeron que eran simplemente seis meses y que regresaríamos a Cuba”, indicó.
Molina señaló además que sus relaciones con funcionarios de FHRC no han sido las mejores, pero se limitó a contestar que sólo le han pedido que regrese a Cuba.
El Miami Dade College (MDC) y la FHRC trabajan en la segunda fase del programa Somos un solo Pueblo con una matrícula mayor que en la primera edición.
Con este programa, los estudiantes cubanos que residan en la isla podrán inscribirse en cursos académicos “a distancia” proporcionado por MDC y financiado por FHRC, dijo la organización fundada en 1992 con la intención de “promover una transición no violenta a una Cuba libre y democrática”.
Martinoticias.com intentó contactar con Alejandro Cuello y Aleidis Catá, pero no respondieron a los pedidos de entrevista.