La Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia (JuventudLAC) lanzó una campaña de recogida de firmas para pedir al Gobierno de Chile que no invite al gobernante cubano Raúl Castro, ni al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a la ceremonia de cambio de mando del 11 de marzo en Valparaíso.
"No puede ser que en un acto democrático como un cambio de mando se invite a líderes, o a dictadores en este caso, que no cumplen con esos procesos democráticos en sus países", dijo este miércoles a Efe Juan Carlos Vargas, coordinador de la campaña que recauda firmas a través de Change.org.
Las firmas se entregarán a la Cancillería chilena y al equipo del presidente electo, Sebastián Piñera, que el 11 de marzo recibirá la banda presidencial de manos de la socialista Michelle Bachelet.
JuventudLAC, formada por un centenar de organizaciones juveniles de una veintena de países y presidida por Rosa María Payá, hija del disidente cubano Oswaldo Payá, ha lanzado la campaña bajo el lema "El que los invita es cómplice".
"Los constantes atropellos de Maduro y Castro a los derechos humanos de nuestros hermanos, la grave situación de desabastecimiento de alimentos y medicinas son algunas de las causas para considerar que estos personajes no merecen ser invitados; estamos convencidos de que #ElQueLosInvitaEsCómplice", dice el texto que acompaña la petición.
El coordinador de la campaña dijo que, según han podido averiguar a través de parlamentarios de la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso, la Cancillería chilena ha invitado a la ceremonia a todos los jefes de Estado del continente americano, incluidos Maduro y Castro.
"Es fundamental que los demócratas de nuestra región desconozcan a los representantes de regímenes que han usurpado el poder en violación de la voluntad soberana de la ciudadanía como sucede en Venezuela y Cuba", señaló Payá en un comunicado.
Por el lado del gobierno entrante de Piñera, parece que también hay la intención de invitarlos a todos, precisó Juan Carlos Vargas.
Si se confirma la presencia de Maduro en la ceremonia el 11 de marzo, Vargas anticipó que organizarán, junto a la comunidad venezolana que vive en Chile, protestas y manifestaciones para demostrar que el presidente de Venezuela "no es bienvenido" al país suramericano.
La posible visita a Chile de Maduro ha generado el rechazo de diputados y senadores de diferentes colores políticos, que consideran que el Gobierno de la presidenta Bachelet no debería invitarlo.
"Ese personaje no debería estar presente. Es un dictador que persigue a los opositores, y en su país no hay libertad de prensa", dijo el diputado oficialista Jorge Tarud.
El senador Francisco Chahuán, del partido conservador Renovación Nacional (RN), acusó al Gobierno venezolano de vulnerar la cláusula democrática de la Organización de Estados Americanos (OEA) y Unasur.
(Con información de EFE y Redes Sociales)