La incapacidad del régimen cubano para crear un mercado mayorista donde los trabajadores por cuenta propia puedan abastecerse de materias primas y productos para sus negocios le estaría costando un año de cárcel a una cuentapropista habanera, de acuerdo con un video presentado por Alex Otaola en su programa de internet Hola Ota-ola!.
Todo porque ella --presentada bajo el nombre de Marisleydis Rojas Peña-- y otras ocho personas hicieron la cola varias veces en una feria estatal y compraron alrededor de 70 cartones de huevos para su negocio.
“El 20 de julio, yo que soy cuentapropista compré huevos en una feria que hizo el Estado en 17”, dice la mujer, aparentemente refiriéndose a la Calle 17 en el reparto habanero del Vedado.
Menciona por su nombre a un periodista cubano que, según cuenta, la denuncio a la policía. No le sirvió de nada mostrar su carnet de cuentapropista al hablar con los agentes, que le decomisaron los huevos y la mandaron a la estación policial.
“Pasada una semana me volvieron a llamar, y según [el] instructor, me dice que fue que la fiscalía mandó a identificar… a hacer un trabajo más exhaustivo”, manifiesta la mujer en el video. “Nos dijeron que el carro tenía que quedarse detenido en la estación de policía, y tenían que volver a hacerle… tomarle declaración nuevamente a los trabajadores”.
No queda claro si al decir “trabajadores”, se refiere a los empleados de la feria o a las otras ocho personas que la acompañaron e hicieron la cola varias veces para comprar los huevos.
Hubo dos o tres semanas de investigaciones, y este miércoles 18 de septiembre la sometieron a un juicio en el cual salió a relucir “la coyuntura”.
“Expusieron las razones que ellos entienden […], por la situación que está pasando el país ahora yo tengo que cumplir un año de privación de libertad”, denuncia en el video, después que ella, como cuentapropista, compró los huevos “de la mejor manera posible, lo más legal posible”.
Entonces también le decomisaron el automóvil.
“Por haber comprado huevos me quitaron el carro, que mil años llevábamos trabajando para obtener algo”, exclama. “Entre ellos y lo que ellos llaman revolución tienen hecha una camarilla para hacer esto que [le están haciendo a la población], humillar, quitarle los valores, porque sencillamente lo que soy es una trabajadora, y [así es como] termino”.
Según ella, Cuba es el país donde los delincuentes se fabrican.
“Porque aquí cuando no tienes antecedentes te los buscan, y esto es todo lo que ha pasado: antecedentes fabricados por ellos, sencillamente por comprar huevos”, manifiesta.
Al final del video habla una joven embarazada que se presenta como la hija de la cuentapropista, diciendo que ahora ella y su hermano de 10 años quedaron solos, cuando ella está a punto de dar a luz.
“Porque, además, el padre de mi hijo está preso por vender espejuelos con aumento para resolverle la vida a la gente, porque en este país no hay”, denuncia la joven. “Esto lo estoy haciendo para que vean el abuso de poder que cometieron con mi mamá”.