Cuba reportó este sábado cuatro muertes y 888 nuevos casos de COVID-19 en medio de restricciones y un nuevo protocolo sanitario que buscan contener la ola de contagios que afecta a casi la totalidad del país.
De tan solo 12,056 casos de coronavirus al finalizar el 2020, la cifra asciende hoy a 37,483. En lo que va de año ya se han producido 25,427 nuevos contagios, y el pico se extiende.
Las autoridades de Salud Pública llamaron a la población a mantener el distanciamiento social y otras medidas de control en las celebraciones de este domingo, 14 de febrero, Día de los Enamorados.
Lee también Cuba entre países que han usado la pandemia para reprimir la libertad de expresiónPermanecen ingresadas 17,900 personas, de ellas 3,386 sospechosas, 9,857 en vigilancia y 4,657 confirmadas con coronavirus. En las salas de terapia intensiva se atiende a 69 pacientes confirmados, de ellos 37 críticos y 32 graves, informó en su conferencia de prensa diaria el jefe de Epidemiología del MINSAP, Dr. Francisco Durán.
La situación más compleja se presenta en las provincias de La Habana (433), Guantánamo (111), Santiago de Cuba (105) y Pinar del Río (56).
Durán llamó la atención sobre Villa Clara, con 26 casos en el día y una tendencia a aumentar el número de casos. La provincia, en fase de transmisión autóctona, tiene un total de 68 focos activos, informó el diario estatal Vanguardia.
Centro Habana, epicentro del virus en la capital
En la capital, Centro Habana es el epicentro del contagio, donde en los últimos 15 días se acumulan 395 sospechosos, con un promedio de 26 casos diarios, y se mantienen activos 97 controles de focos con 257 casos confirmados, reportó el diario estatal Tribuna de La Habana.
Lee también Cuba sobrepasa los 36 mil casos de COVID-19, reporta otras 4 muertesEn el barrio de Los Sitios, con el mayor porciento de contagios, el Consejo de Defensa Provincial (CDP) decidió incrementar las medidas restrictivas a partir de las 6:00 de la tarde este sábado, informó el diario, sin agregar detalles.
El CDP también aprobó utilizar la Escuela de Ballet de ese municipio como centro de aislamiento de casos sospechosos de bajo riesgo.
Nuevo protocolo se centra en pacientes de alto riesgo
Entre los cambios que contiene el nuevo protocolo de atención al COVID 19 en Cuba, se encuentra el tratamiento que se da a los casos sospechosos y los de "alto riesgo".
“Los de bajo riesgo van a un lugar, donde se les vigila y reciben un tratamiento. El de alto riesgo, a su vez, se traslada a hospitales a recibir el protocolo establecido”, según explicó en el programa de la televisión estatal Mesa Redonda Ileana Morales, directora nacional de Ciencia e Innovación Tecnológica del MINSAP.
Lee también El aislamiento es un caos, se quejan habaneros atrapados en sus barrios por COVID-19Las autoridades de salud han decretado que todo sospechoso que resulte positivo a un test de antígeno comience inmediatamente a recibir Interferón. “Una hora es importante. 10 mucho más y 24 importantísimas. Hay que ganar en tiempo”, dijo Morales.
A los sospechosos de alto riesgo, si presentan algún síntoma de inflamación, también se les administra Interferón y, además, Itolizumbab o Jusvinza.
Este protocolo se ha aplicado ya en Morón, Ciego de Ávila, y Pinar del Río, donde, según Morales, hubo sospechosos que luego no fueron positivos a COVID-19, pero en los que el tratamiento resultó efectivo “porque tenían una enfermedad con igual mecanismo de tormentas de citocinas e iban a agravar y posiblemente a morir”.
Lee también “Los están dejando en las casas sin PCR": cubanos se quejan de mal manejo gubernamental de rebrote de COVID-19Según Morales, el principal cambio es el énfasis que ahora se hace en el paciente de alto riesgo: “Es en esta última clasificación donde va a centrarse la mayor atención del nuevo protocolo”.
La experta dijo que ahora el paciente asintomático y sintomático leve se atienden en un tipo de centro, mientras los sintomáticos moderados, los de riesgo y los pacientes graves y críticos, en otro.
Añadió que la definición de “alto riesgo” es considerada como un grupo decisivo para bajar la incidencia de la mortalidad, que ha ido aumentando a medida que suben los contagios. Entre el 2,5% a 3% de cada 100 personas que se contagian en Cuba puede pasar a graves o críticos, subrayó.