El presidente de Hungría sancionó el martes una ley que aprueba el ingreso de Suecia a la OTAN, tras 18 meses de demoras.
La firma del presidente Tamás Sulyok era necesaria para sancionar la ley aprobada por el Parlamento el mes pasado. Así culminaron meses de negociaciones de los aliados para convencer al gobierno nacionalista húngaro que dejara de bloquear el ingreso de Suecia.
El gobierno del primer ministro Viktor Orbán presentó los protocolos para aprobar el acceso de Suecia en julio de 2022, pero la ley quedó estancada en el Parlamento debido a la oposición de legisladores oficialistas.
Suecia y Finlandia presentaron sus solicitudes de ingreso a la OTAN en mayo de 2022, tras la invasión rusa de Ucrania.
El ingreso de un país requiere la aprobación unánime de los miembros. Turquía dio su aprobación en enero y Hungría fue el último de los 31 miembros en hacerlo.
Ejercicios militares
Las fuerzas armadas suecas se unieron el lunes a la OTAN para realizar maniobras, aportando soldados, helicópteros y aviones de combate, mientras la alianza lleva a cabo su mayor serie de ejercicios militares desde el final de la Guerra Fría.
Los ejercicios -en los que participan más de 20.000 soldados de más de una docena de países- tienen lugar muy al norte en Europa, una zona que está experimentando cambios con la adhesión de Suecia y Finlandia, que dieron la espalda a su larga historia de no alineamiento después de que Rusia invadiera Ucrania.
En Bodoe, en el norte de Noruega, los F-35 estadounidenses y noruegos se unieron a los F-18 finlandeses y a los cazas Gripen suecos que volaban a baja altura sobre el cielo de la base militar de Camp Bodin, como parte de una primera prueba de un centro de operaciones aéreas nórdico conjunto, una parte clave de los simulacros.
(Con información de AP y Reuters)