La comunicadora y activista cubana Iliana Hernández, quien fue víctima de un allanamiento y detenida en días recientes, afirmó en entrevista con RadioTV Martí que los agentes de la policía política que requisaron su casa, realmente estaban a la búsqueda de "pintura roja".
Lee también Allanan vivienda y arrestan a activista cubana Iliana Hernández (VIDEO)A la pregunta de a qué atribuía esa nueva ola represiva del régimen cubano, Hernández, reportera de CiberCuba, respondió: "Yo lo atribuyo a Clandestinos. Hoy mismo una vecina ha venido a contarme que ella venía con una amiga y le preguntó a un policía qué estaban buscando y el policía le dijo: ´Pintura roja´".
"Parece que quieren establecer un vínculo entre el movimiento Clandestinos y yo. Estoy en la misma situación de todo el mundo: los sigo en la página, los sigo en Twitter para tener información de las cosas que están haciendo, pero no he hablado absolutamente con ninguno de los miembros de Clandestinos y no sé absolutamente nada (sobre ellos). Si la intención de ellos es vincularme con estos grupos, están bastante equivocados. Yo no soy clandestina, yo soy a cara descubierta", subrayó.
Lee también Los arrestados "no somos nosotros": Clandestinos desmiente a las autoridades cubanasEn otro momento de la conversación, Hernández comentó que la reacción del régimen "tiene que ver con sus vínculos con la familia de (el doctor en Ciencias Biológicas Ariel Ruiz) Urquiola, con mi oposición, con mi trabajo en Cibercuba, con lo que está generando en la sociedad que una persona exprese lo que siente sin miedo a pesar de todas las represalias".
Lee también APLP denuncia prohibición de salida de Cuba contra periodistas independientesAfirmó que con el comienzo del año, la situación para los activistas dentro de la isla es peor. "Empecé el año con un allanamiento, con una acusación. Estoy ahora mismo bajo fianza. Además estoy bajo tres amenazas: dejar de hacer ´contrarrevolución´ -yo no hago ´contrarrevolución´, yo lo que hago es revolución-; irme del país o ir presa. Esas son las alternativas".Sobre el allanamiento, Hernández explicó que "entraron con una supuesta orden de registro. Se llevaron varios artículos. La orden decía que venían por artículos de dudosa procedencia".
Lee también Reporte de Human Rights Watch resalta violaciones a los DDHH en Cuba"En realidad -amplio-, a orden estaba un poco incompleta. No me dejaron que la viera bien. No me dejaban que me acercara a ver la supuesta orden de registro. Se llevaron mi ordenador, y dos ordenadores de mi mamá, mi teléfono, dos antenas viejas, con una se veía un televisor y otra, que estaba guardada llena de polvo porque no se usaba, una memoria flash de 16 gigs, un disco duro externo, que además está roto y un trípode que me había regalado una amiga, además de documentos sobre una denuncia que yo hice".
Explicó que tras el registro, "me llevaron detenida para la estación y me hicieron una acusación de ´receptación´ por los equipos, que fueron comprados en el exterior y pasaron todos por la aduana. Lo que pasa es que aquí la aduana jamás me ha dado ningún documento. Son cosas absurdas. Yo tengo documentación que garantiza que esos artículos son míos, que son comprados en el exterior, pero no me la aceptan porque dicen que eso no es una propiedad".
Hernández denunció que "en ningún país del mundo dan una propiedad por la compra de un producto, solo un recibo. Bueno, pues a mí me exigen la propiedad de estos artículos".