Estados Unidos condenó este jueves la detención de activistas y disidentes en Bielorrusia, donde actualmente existen más de 100 presos políticos por ejercer su derecho a participar pacíficamente en protestas, pedir elecciones libres y justas y abogar por un diálogo nacional para poner fin a la crisis.
Estos presos políticos han estado sujetos a condiciones de detención potencialmente mortales, incluidos informes fidedignos de tortura, dijo este jueves el secretario de Estado, Mike Pompeo, en un comunicado.
Estados Unidos reiteró su apoyo a quienes "permanecen detenidos y cuyo paradero se desconoce, quienes han sido asesinados y quienes continúan afirmando pacíficamente su derecho a elegir a sus líderes en elecciones libres y justas", señala el texto.
Pompeo pidió a las autoridades biolorrusas que cesen de inmediato el uso de la violencia contra los manifestantes pacíficos, liberen a todos los presos políticos y entablen un diálogo significativo con el Consejo de Coordinación y la sociedad civil del país.