Aníbal Reyes, de 34 años y origen cubano, falleció anoche en Madrid al recibir un disparo en la nuca mientras se resistía a permitir que a su novia española le robaran el bolso.
Según la versión que contó la mujer a la Policía, serían las 9:20 de la noche cuando, mientras la pareja paseaba por una calle del distrito de Carabanchel, una persona trató de arrebatarle el bolso a ella. Aníbal habría forcejeado con el atracador y en un momento en que le dio la espalda recibió el balazo mortal.
La novia del fallecido, de origen español, refirió que Aníbal había ido a buscarla a la salida del trabajo, cerca de donde tuvo lugar el asalto. El Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Madrid se hizo cargo de la investigación para tratar de averiguar las causas y localizar y detener al autor del disparo que, según las primeras pesquisas, parece proceder de un arma de pequeño calibre.
Medios madrileños señalan que fuentes policiales dudaban ayer de la versión "fortuita" de este homicidio. Siendo el cubano un hombre corpulento, un tiro en la nuca parecía "demasiado certero" como para ser fruto de un forcejeo provocado por el robo de un bolso.
Pero el diario El Mundo aclara que la víctima no tenía antecedentes penales y tenía los papeles en regla, por lo que no parece haber ningún motivo aparte del mencionado robo.
Agentes de la Policía Científica se desplazaron a su vez al lugar de los hechos para recoger vestigios y pruebas que ayuden a encontrar al homicida, al que testigos describieron como un hombre bajito vestido con una sudadera. Entre los elementos que buscaban está el casquillo de la bala que acabó con la vida de Aníbal.
