El Tribunal municipal de La Habana Vieja suspendió el juicio a la activista antidesalojos Madelín Caraballo Betancourt, previsto para la mañana del 10 de julio en La Habana, según declaraciones de la periodista independiente Dania Virgen García, quien estuvo en las afueras del tribunal junto a una veintena de activistas de derechos humanos que se encontrabana allí para solidarizarse con Caraballo Betancourt.
Todos los testigos se presentaron a declarar en favor de Madelín, acusada de los delitos de desorden público, desacato, instigación a delinquir y resistencia, previstos en el Código penal, para una sanción única y conjunta de tres años de privación de libertad.
La abogada defensora, Amelia Rodríguez Cala, solicitó la libertad de Madelín Caraballo bajo el argumento de que la petición fiscal no se corresponde con los delitos imputados, ya que en documento expedido por la fiscal parecen la valoración de que Caraballo “se reúne con personas de conducta antisocial que no están vinculadas laboralmente” y que “se ha manifestado en innumerables ocasiones en contra del proceso revolucionario”.
La tarde anterior a la suspensión del juicio varios activistas fueron detenidos y amenazados para que no se solidarizaran con Caraballo Betancourt, entre ellos Hugo Damián Prieto Blanco. Los teléfonos de algunos estaban fuera de servicio, incluido el de la madre de Madelín, una anciana de 81 años de edad.
Todos los testigos se presentaron a declarar en favor de Madelín, acusada de los delitos de desorden público, desacato, instigación a delinquir y resistencia, previstos en el Código penal, para una sanción única y conjunta de tres años de privación de libertad.
La abogada defensora, Amelia Rodríguez Cala, solicitó la libertad de Madelín Caraballo bajo el argumento de que la petición fiscal no se corresponde con los delitos imputados, ya que en documento expedido por la fiscal parecen la valoración de que Caraballo “se reúne con personas de conducta antisocial que no están vinculadas laboralmente” y que “se ha manifestado en innumerables ocasiones en contra del proceso revolucionario”.
La tarde anterior a la suspensión del juicio varios activistas fueron detenidos y amenazados para que no se solidarizaran con Caraballo Betancourt, entre ellos Hugo Damián Prieto Blanco. Los teléfonos de algunos estaban fuera de servicio, incluido el de la madre de Madelín, una anciana de 81 años de edad.
