La Asamblea Nacional de Lituania rechazó el Acuerdo de Diálogo Político de la Unión Europea con Cuba, una decisión que pone contra las cuerdas el actual marco de colaboración entre Bruselas y La Habana, severamente criticado por la Eurocámara.
Según la resolución aprobada el miércoles de manera unánime, "no es políticamente conveniente ratificar el Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación UE-Cuba".
La tesis alerta de que "no se puede alentar al gobierno de Cuba a que siga por el mismo camino (...), continúe con su peligrosa estrategia regional y refuerce la opresión del pueblo cubano".
En el texto aprobado, los legisladores lituanos se solidarizan con las víctimas de la represión que exigen derechos políticos, civiles, económicos y culturales.
Además, exigen la "liberación inmediata e incondicional de más de un centenar de presos políticos", y mencionan los casos de persecución contra Tania Bruguera, Luis Manuel Otero Alcántara, Maykel Castillo (Osorbo), Denis Solís, Luis Robles y los detenidos en la protesta de la calle Obispo, entre otros.
"La resolución del Parlamento lituano es de máxima importancia. El artículo 25 de la Convención de Viena indica que si un Estado comunica el deseo de no ratificar un acuerdo, éste deja de estar vigente de inmediato", explicó Javier Larrondo, presidente de la ONG Cuban Prisoners Defenders.
En su opinión, dadas las circunstancias, "el acuerdo en estos momentos está virtualmente suspendido, a falta de la confirmación del gobierno lituano a la Unión Europea".
"Lo único que puede salvar el acuerdo es que se dialogue públicamente con la sociedad civil, se realicen acuerdos de cooperación financiera y de ayuda a la sociedad civil y se cumpla con la resolución del Parlamento Europeo del 10 de junio pasado", apuntó Larrondo.
Para Alejandro González Raga, director ejecutivo del Observatorio Cubano de Derechos Humanos (con sede en Madrid), la decisión lituana "es un acto de solidaridad y una muestra de compromiso democrático que la Unión Europea deberá mirar con sonrojo".
"Los demócratas cubanos estaremos eternamente agradecidos por este gesto del pueblo lituano, en la voz de sus representantes", afirmó el activista.
La resolución de la Asamblea Nacional de Lituania declaró además, "firme e inequívocamente", que los vínculos de La Habana con Moscú, Caracas, Teherán, las FARC y el ELN "constituyen una amenaza para los países y sociedades vecinas de la región latinoamericana".
Lituania era el único miembro de la Unión Europea pendiente de ratificar el acuerdo UE-Cuba, firmado hace casi cuatro años durante el mandato diplomático de Federica Mogherini.