El Gobierno de Venezuela removió a Rafael Ramírez, un poderoso exministro de Petróleo y expresidente de la estatal PDVSA, de su cargo como representante del país ante Naciones Unidas, dijeron el miércoles dos fuentes con conocimiento de la situación.
El presidente Nicolás Maduro designó el domingo al mayor general Manuel Quevedo para que lidere Petróleos de Venezuela (PDVSA) y el Ministerio de Petróleo, parte de lo que ha denominado una cruzada anticorrupción dentro de la estatal envuelta en varios escándalos por desfalco.
“Fue destituido anoche”, dijo a Reuters una de las fuentes familiarizada con el hecho.
Maduro había dicho el martes que presentaría nuevas pruebas de supuestas “mafias” compuestas por “traidores” dentro de la industria petrolera, en lo que parecía una referencia a funcionarios que ocuparon cargos dentro de la estatal.
Ramírez fue un cercano colaborador del fallecido presidente Hugo Chávez, e incluso en algún momento fue considerado como su posible sucesor, lugar que finalmente ocupó Maduro. Fuentes del Gobierno hablaron de una pugna entre los dos funcionarios.
“Ramírez trató de negociar y mover sus fichas pero no le fue posible. Su artículo en Aporrea (un portal de opiniones) fue la gota que rebasó el vaso en la pelea Maduro-Ramírez”, explicó una de las fuentes que pidió el anonimato.
Ramírez ha venido objetando las decisiones económicas del Gobierno socialista, cuando el país atraviesa una profunda crisis de escasez de alimentos y medicinas, inflación descontrolada y recesión, agravada por el desplome de la producción petrolera a niveles mínimos de 30 años.
“La consigna fundamental del plan era estabilizar la economía, alcanzar los equilibrios”, escribió Ramírez en uno de sus artículos, describiendo un programa cambiario que intentó aplicar cuando fue vicepresidente económico del país en 2014.
“No se pudo ¿Qué fuerzas actuaron torpedeando esta agenda?, siguen allí y hay que identificarlas, no son factores revolucionarios, se mimetizan, a veces juegan por las bandas, manipulan, adulan, atacan”, agregó.
Ramírez sigue en Nueva York, dijo uno de los entrevistados. No ha habido un anuncio oficial.
El Parlamento venezolano, controlado por la oposición denunció el año pasado que halló una malversación de unos 11.000 millones de dólares en PDVSA, a través de manejos irregulares llevados a cabo entre 2004 y 2014, cuando Ramírez presidió la estatal. El exfuncionario negó las acusaciones.
[Agencia Reuters]