ViktorYanukovich acusa a adversarios de querer "tomar el poder".
El presidente de Ucrania, ViktorYanukovich, advirtió el miércoles a sus oponentes que podría desplegar la fuerza contra ellos después de lo que calificó como un intento de "toma de poder" por medio de incendios y asesinatos.
Mientras los manifestantes se enfrentaban con policías antidisturbios en el centro de Kiev, Yanukovich recalcó en un comunicado que se había abstenido de usar la violencia desde el inicio de las protestas y que había ofrecido insistentemente el diálogo y posibles elecciones. Pero afirmó que estaba siendo presionado por sus asesores para que tomara una línea más dura.
El último balance oficial sobre la violencia en la capital es de 25 muertos y 241 heridos, entre ellos 79 policías y cinco periodistas.
"Sin ningún mandato del pueblo, ilegalmente y en una violación de la Constitución de Ucrania, estos políticos -si se puede usar ese término- han recurrido a la matanza, a los incendios provocados y a los asesinatos para tratar de tomar el poder", dijo el presidente.
Asimismo les advirtió que si quieren continuar con ese tipo de manifestaciones, deben reconocer que están apoyando a los radicales.
Por otra parte, reiteró su voluntad de organizar nuevas elecciones y respetar los resultados si gana la oposición. Pero dijo que sus adversarios han hecho demandas para tomar el poder inmediatamente.
"Ellos cruzaron una línea cuando llamaron a la gente a las armas", dijo. "Y los infractores deben ser llevados ante la corte, la cual determinará su castigo. Ese no es un capricho personal, es mi deber como garante de la Constitución".
La Unión Europea (UE) anunció que estudiará sanciones contra los responsables de la represión.
La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, indicó que analizará junto a los responsables de seguridad del bloque "todas las opciones, incluyendo sanciones contra los responsables de la represión y de violaciones de los derechos Humanos" en Ucrania.
Los ministros de Exteriores de los 28 celebrarán el jueves una reunión de emergencia en Bruselas.
Por su parte, uno de los líderes de la oposición, el boxeador convertido en político Vitaly Klitschko, dijo a un periódico alemán que Yanukovich quiere un nuevo diálogo y que él está dispuesto a asistir si la policía detiene sus acciones en contra de los manifestantes.
"El presidente quiere hoy otra reunión con la oposición y estamos dispuestos", dijo Klitschko, citado en el sitio web del diario Bild, donde es un columnista regular.
"Nuestra demanda es clara: el despliegue de la policía contra los manifestantes debe detenerse de inmediato, debe haber una inmediato cese al fuego para las negociaciones", añadió.
En Leopolis (oeste), los manifestantes se apoderaron de edificios públicos y de depósitos de armas. Los incidentes en Kiev se desencadenaron el martes en las inmediaciones del Parlamento.
Durante la noche, las fuerzas antidisturbios lanzaron un asalto con una lluvia de granadas lacrimógenas y ensordecedoras contra el Maidán, la plaza de la Independencia, epicentro de la contestación. Los manifestantes replicaron con botellas incendiarias.
Por la mañana, el asalto cesó, y los manifestantes y las fuerzas de seguridad permanecían frente a frente, con cascos y escudos por ambas partes, separados por una cortina de fuego, en un paisaje de devastación.
La agitación en Ucrania se remonta a noviembre, cuando el gobierno decidió repentinamente suspender las negociaciones de asociación con la Unión Europea (UE) y estrechar las relaciones económicas con Rusia.
Mientras los manifestantes se enfrentaban con policías antidisturbios en el centro de Kiev, Yanukovich recalcó en un comunicado que se había abstenido de usar la violencia desde el inicio de las protestas y que había ofrecido insistentemente el diálogo y posibles elecciones. Pero afirmó que estaba siendo presionado por sus asesores para que tomara una línea más dura.
El último balance oficial sobre la violencia en la capital es de 25 muertos y 241 heridos, entre ellos 79 policías y cinco periodistas.
"Sin ningún mandato del pueblo, ilegalmente y en una violación de la Constitución de Ucrania, estos políticos -si se puede usar ese término- han recurrido a la matanza, a los incendios provocados y a los asesinatos para tratar de tomar el poder", dijo el presidente.
Asimismo les advirtió que si quieren continuar con ese tipo de manifestaciones, deben reconocer que están apoyando a los radicales.
Por otra parte, reiteró su voluntad de organizar nuevas elecciones y respetar los resultados si gana la oposición. Pero dijo que sus adversarios han hecho demandas para tomar el poder inmediatamente.
"Ellos cruzaron una línea cuando llamaron a la gente a las armas", dijo. "Y los infractores deben ser llevados ante la corte, la cual determinará su castigo. Ese no es un capricho personal, es mi deber como garante de la Constitución".
La Unión Europea (UE) anunció que estudiará sanciones contra los responsables de la represión.
La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, indicó que analizará junto a los responsables de seguridad del bloque "todas las opciones, incluyendo sanciones contra los responsables de la represión y de violaciones de los derechos Humanos" en Ucrania.
Los ministros de Exteriores de los 28 celebrarán el jueves una reunión de emergencia en Bruselas.
Por su parte, uno de los líderes de la oposición, el boxeador convertido en político Vitaly Klitschko, dijo a un periódico alemán que Yanukovich quiere un nuevo diálogo y que él está dispuesto a asistir si la policía detiene sus acciones en contra de los manifestantes.
"El presidente quiere hoy otra reunión con la oposición y estamos dispuestos", dijo Klitschko, citado en el sitio web del diario Bild, donde es un columnista regular.
"Nuestra demanda es clara: el despliegue de la policía contra los manifestantes debe detenerse de inmediato, debe haber una inmediato cese al fuego para las negociaciones", añadió.
En Leopolis (oeste), los manifestantes se apoderaron de edificios públicos y de depósitos de armas. Los incidentes en Kiev se desencadenaron el martes en las inmediaciones del Parlamento.
Durante la noche, las fuerzas antidisturbios lanzaron un asalto con una lluvia de granadas lacrimógenas y ensordecedoras contra el Maidán, la plaza de la Independencia, epicentro de la contestación. Los manifestantes replicaron con botellas incendiarias.
Por la mañana, el asalto cesó, y los manifestantes y las fuerzas de seguridad permanecían frente a frente, con cascos y escudos por ambas partes, separados por una cortina de fuego, en un paisaje de devastación.
La agitación en Ucrania se remonta a noviembre, cuando el gobierno decidió repentinamente suspender las negociaciones de asociación con la Unión Europea (UE) y estrechar las relaciones económicas con Rusia.