Revelan detalles del juicio de apelación de los jóvenes cubanos condenados por la jueza Melody

Tribunal Provincial de Villa Clara, acordonado por la policía. (Foto: Archivo/Facebook)

Familiares de los jóvenes sentenciados por la jueza Melody González, solicitante de asilo en EEUU, dijeron que las autoridades accedieron al juicio solo para acallarlos y describieron cómo transcurrió la audiencia.

Tras ratificarse la sentencia a cuatro jóvenes villaclareños condenados por la exjueza Melody González, quien actualmente pide asilo político en Estados Unidos, sus familiares consideraron que durante el juicio de apelación no se presentaron pruebas ni testimonios que demostrasen la culpabilidad de los encausados, y calificaron de "farsa" la audiencia.

“Ni cambio de medida ni nada, nunca aceptaron nada. Ellos ratificaron lo mismo que hizo Melody; ellos lo ratificaron. Hicieron el juicio para callarnos la boca”, dijo a Martí Noticias Dunia Marisol Pérez, madre del preso político Eddy Daniel Rodríguez Pérez, uno de los condenados.

González, quien llegó a Estados Unidos por el programa de parole humanitario, dictó una sentencia contra los jóvenes Andy Gabriel González Fuentes, Eddy Daniel Rodríguez Pérez y Luis Ernesto Medina Pedraza de cuatro años de prisión y para Adain Barreiro Pérez, tres años, por el delito de “atentado”. El veredicto fue ratificado en el juicio de apelación el pasado viernes.

La exjueza dijo en EEUU que había sido presionada para encarcelar a los jóvenes, acusados de lanzar cocteles molotov contra un jeep y viviendas de funcionarios y oficiales de la policía y la Seguridad del Estado en la localidad de Encrucijada, en la provincia Villa Clara, el 18 de noviembre de 2022.

Rodríguez Pérez, de 28 años, continuará cumpliendo su sentencia de cuatro años de cárcel en la prisión El Pre de Santa Clara. Su madre asegura que durante la vista quedó demostrado que no hay pruebas concretas para inculpar a los cuatro jóvenes.

“Los tres abogados hicieron un trabajo magnifico, le demostraron [al tribunal] de nuevo que no tienen pruebas ningunas. ¡Y volvieron a la misma historia!, porque la corrupción aquí no se va a acabar nunca. ¡Se tiene que caer esto para acabarse!", denunció la mujer.

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Familiares dan testimonio del segundo juicio a jóvenes de Villa Clara condenados por Melody

La madre de Rodríguez Pérez explicó que la comparecencia de los testigos de la fiscalía puso en evidencia lo irregular del proceso judicial.

"Esos militares no subieron en el primer juicio y la jueza les hacía preguntas como para que ellos respondieran lo que ella quería, para que se acordaran de lo que habían dicho, pero nada, ellos no sabían", dijo.

El hermano de Adain Barreiro, otro de los acusados, José Miguel Barreiro, pudo estar presente en el juicio de apelación, celebrado en el Tribunal Provincial de Villa Clara.

“Los oficiales que fueron a declarar, claramente, pasaron un gran bochorno, porque no sabían ni qué testificar ni qué decir. (...) Las respuestas eran ‘no sé’, ‘no se puede decir’ o ‘yo no estaba presente’", detalló desde Santa Clara.

Barreiro criticó el resultado de la vista oral, que calificó de farsa.

"Una farsa, todo fue una farsa... porque no hay que saber de leyes para saber la defensa que tuvieron (hicieron) los abogados, y que, en el juicio, razones había suficientes para saber que ellos no eran los culpables de los delitos”, aseguró.

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El sábado, la madre de Adain Barreiro dijo a Martí Noticias que el proceso fue una "injusticia", un juicio "amañado", en donde se demostró que "los oficiales que declararon estaban mintiendo".

Añadió que en la audiencia no se presentó el teniente coronel que golpeó a su hijo, ni el instructor que estaba frente al caso.

González compareció el pasado 31 de julio ante una corte de Inmigración de Estados Unidos, donde renegó de su filiación al Partido Comunista. Según reportó Diario de Cuba, González argumentó que la militancia en el único partido político permitido en la isla "no significa nada más que una carga para la mayoría de los militantes y un requisito de supervivencia en un país donde todo está organizado, y rechazar una propuesta como esa implica perder derechos de todo tipo, entre ellos los de elección laboral/profesional".

(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)