Una exposición de 15 acuarelas del espía confeso y condenado en Estados Unidos, Antonio Guerrero, tuvo lugar este sábado en una galería del barrio conocido como La Pequeña Haití, en Miami. Promotores y simpatizantes del autor, calificaron de éxito la muestra que también contó con la presencia de un reducido grupo de manifestantes que repudiaron el acto por considerar que era promovido por el gobierno de La Habana.
Poco más de 50 personas asistieron a la exposición titulada, ¨Yo me muero como viví, que además contó con textos de Gerardo Hernández y Ramón Labañino, otros dos miembros de la llamada Red Avispa desarticula por el FBI en Miami en 1998, en uno de los golpes más duros que jamás hayan recibido los servicios de inteligencia del gobierno cubano.
Hubo de todo, refrigerios y un tórrido calor, pues el local carecía de aire acondicionado. Del otro lado de la acera, los manifestantes desplegaron pancartas acusando al autor de terrorista y gritaron consignas anti castristas. La policía tuvo que intervenir cuando los manifestantes ocuparon el centro de la avenida y obstruyeron el tráfico. No se reportaron incidentes de índole violento.
En medio de protestas, espía cubano presenta exposición de acuarelas.