Panamá derrotó 9-7 a Puerto Rico en el último partido de la quinta jornada de la Serie del Caribe que se disputa en Miami y se convirtió en el primer clasificado a las semifinales del torneo, al mantener récord invicto de 4-0.
Los Federales de Chiriquí, campeones de la liga profesional panameña, habían ganado sus tres primeros juegos ante Curazao, México y Nicaragua, y muchos expertos pensaban que hasta ahí llegarían, pues les tocaba enfrentar a tres de los más poderosos equipos del certamen: Puerto Rico, Venezuela y República Dominicana.
Sin embargo, ante los boricuas Criollos de Caguas, los istmeños salieron impetuosos y en el segundo inning hicieron saltar del montículo al abridor puertorriqueño Derrick Adams, al fabricarle racimo de cuatro carreras después de dos outs.
En el tercero, Nelson Velázquez acercó la pizarra 4-3 con jonrón de dos carreras, pero en el cierre de ese episodio, Panamá volvió a la carga y fabricó tres más, al combinar tres hits, con dos errores de la defensa de Puerto Rico, una base por bolas y dos pelotazos.
Caguas se pegó en la pizarra al descontar una en el sexto y añadir dos más en el séptimo, pero Chiriquí marcó dos en el octavo que resultaron decisivas, pues Puerto Rico marcó otra en el noveno por bambinazo solitario de Heliot Ramos.
Con esta victoria, los Federales aseguran un lugar entre los cuatro mejores del torneo, mientras que los Criollos ahora tienen 3-2 y tienen un pie en semifinales, aunque les queda pendiente un juego ante Curazao.
Venezuela manda a México para su casa
Un racimo de seis carreras en el séptimo episodio, el llamado inning de la suerte, fue todo lo que necesitaron los Tiburones de La Guaira, campeones de la pelota venezolana, para vencer 6-1 a los Naranjeros de Hermosillo y eliminar a los mexicanos de cualquier posibilidad de avanzar a semifinales.
El manager Ozzie Guillén movió su alineación en busca de ofensiva y envió a la banca al cubano Yasiel Puig, quien llevaba de 11-1 (.091), con seis ponches.
Guillén apeló entonces al llamado juego pequeño, con velocidad en función del ataque, para emboscar en el séptimo al pitcheo mexicano, dominante en los seis primeros episodios.
Con el juego 1-0 favorable a los aztecas, Leonardo Reginatto disparó hit y avanzó a tercera en jugada de bateo y corrido bien ejecutada por Alcides Escobar.
Otro cañonazo de Alexi Amarista produjo la carrera del empate y envió a las duchas a Juan Gámez, tercer lanzador utilizado por los Naranjeros.
Wilfredo Tovar recibió al relevista Curtis Taylor con imparable y puso delante a los Tiburones 2-1, mientras que Wilson Ramos remolcó la tercera del inning con cohete.
Con bases llenas, entró de relevo Elkin Alcalá y Luis Torrens limpió las almohadillas con triple, para completar el racimo de seis.
Ahora Venezuela tiene tres victorias y un revés, con partidos pendientes ante Panamá y Nicaragua.
Curazao mantiene vivas sus esperanzas
Con una labor espectacular del veterano lanzador Shairon Martis, Curazao derrotó 6-2 a Nicaragua y mantuvo vivas sus esperanzas de avanzar a las semifinales.
Martis trabajó ocho entradas completas, con 98 pitcheos y permitió dos limpias con cuatro hits.
Con esta victoria, los Suns de Curazao emparejaron su balance de ganados y perdidos a 2-2, el mismo récord de República Dominicana, su rival del martes.
Henrik Clementina bateó un jonrón y remolcó tres carreras por los ganadores, mientras que Nicaragua sigue sin hacer la cruz en su primera participación en Series del Caribe y ya está totalmente fuera de opciones.