Yunior Berges González, quien protagonizó una protesta pacífica en Bayamo para exigir a las autoridades atención médica para su niña de un año de edad hija y el complemento alimenticio que necesita la menor, logró ambos objetivos, según dijo hoy a Martí Noticias.
“Los funcionarios de Salud me dijeron que en tres días comenzarán a resolver el problema de la niña, que ya está ingresada en el Hospital”, dijo Berges, quien habló con la reportera Yolanda Huerga.
Berges comentó que estuvo varias horas detenido en la estación de policía de Bayamo luego de que el martes recorrió varias calles de la ciudad, cartel en mano, reclamando atención de las autoridades para conseguir Prolacsin, un complemento alimenticio especial, de fabricación nacional, para niños con intolerancia a la lactosa.
“Aquí hay 72 niños con ese padecimiento y muchas veces falta el prolaxin, la última vez hasta cuatro meses porque según dijeron no tenían etiquetas para el envase”, dijo.
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Berges atrvesó el Parque Central y se presentó a las 10. AM ante la sede del Gobierno Municipal portando un cartel en su pecho reclamando:. “Mi bebé necesita atención médica y alimentación”, decía el mensaje con letras rojas. Una vez dentro del edificio fue conducido a una oficina.
El sitio digital Cubanet informó que a esa misma hora, Yisely Vinajera Hernández, madre de la niña, batallaba en el Hospital Infantil bayamés “Luis Ángel Milanés”, intentando lograr el ingreso médico de la bebé.
Según la historia clínica de su hija, Yania Gema Berges Vinajera, la bebé nunca fue lactante por provenir de padres con VIH. Entre otros padecimientos, sufre de anemia e infección urinaria y vaginal por Escherichia coli, así como enfermedad diarreica aguda, clínicamente agravada por mala alimentación, intolerancia a la lactosa, déficit enzimático e inmunodeficiencia transitoria lactante.
Tratando de corregir sus padecimientos, la menor ha sufrido 12 ingresos médicos, innumerables exámenes, análisis y ha estado sometida a varios tratamientos, explicó a Cubanet el periodista independiente Roberto Rodríguez Carmona.
Actualmente es alimentada con Prolacsin (leche de soya), que “estuvo en falta en la provincia desde julio hasta octubre, supuestamente por falta de etiquetas”, dice la madre de la niña. El alimento estuvo disponible luego por dos meses, pero “ahora está en falta de nuevo y para colmo, cuando llega, no reponen el producto atrasado”.
“Uno queda obligado a comprarlo con divisa (CUC), pero lo único que cambia es el precio y la etiqueta”, había referido Yunior anteriormente, mostrando sendos paquetes del alimento, uno asignado por la dieta médica y otro comprado en la red comercial.