En el documento, dicho grupo asegura que proporcionando conocimientos y asesoramiento técnico a los ciudadanos de la isla en el sector no estatal, es una forma de asistencia humanitaria.
Las calles de La Habana están llenas de cuentapropistas, dueños de salones de uñas, cafés, restaurantes, peluquerías, galerías de arte y talleres de reparación de teléfonos celulares, según la Americas Society Council of the Americas.
Y por primera vez en 55 años, un número creciente de cubanos ahora pueden comenzar a forjar sus propios destinos, iniciando sus propios negocios, incrementando su autosuficiencia y la independencia del Estado.
En una carta dirigida al presidente Obama, dicho grupo asegura que dada la situación económica en Cuba, proporcionando conocimientos y asesoramiento técnico a los ciudadanos en el sector no estatal es una forma de asistencia humanitaria.
En el amplio espectro de empresas que han surgido en los últimos cinco años, existen contrapartes profesionales individuales y organizacionales obvias en los Estados Unidos que podrían proporcionar tanto asesoramiento técnico como conexiones y aportación financiera.
Entre otras muchas recomendaciones, el grupo también asegura que los empresarios individuales en la isla deben ser capaces de comprar insumos muy necesarios para sus negocios de fuentes mucho más baratas y poder vender a un mercado mucho más grande: los Estados Unidos.
Según Americas Society Council of the Americas viajaron a Cuba para reunirse con los empresarios de la isla en virtud de una licencia general para establecer relaciones comerciales permitirá que este sector no estatal se expanda, pero más importante aún, dicen, ayudará a EE.UU. y a los cubanos a gozar de una de las libertades y los principios más centrales para el capitalismo: la libertad para ejercer el comercio.
Y por primera vez en 55 años, un número creciente de cubanos ahora pueden comenzar a forjar sus propios destinos, iniciando sus propios negocios, incrementando su autosuficiencia y la independencia del Estado.
En una carta dirigida al presidente Obama, dicho grupo asegura que dada la situación económica en Cuba, proporcionando conocimientos y asesoramiento técnico a los ciudadanos en el sector no estatal es una forma de asistencia humanitaria.
En el amplio espectro de empresas que han surgido en los últimos cinco años, existen contrapartes profesionales individuales y organizacionales obvias en los Estados Unidos que podrían proporcionar tanto asesoramiento técnico como conexiones y aportación financiera.
Entre otras muchas recomendaciones, el grupo también asegura que los empresarios individuales en la isla deben ser capaces de comprar insumos muy necesarios para sus negocios de fuentes mucho más baratas y poder vender a un mercado mucho más grande: los Estados Unidos.
Según Americas Society Council of the Americas viajaron a Cuba para reunirse con los empresarios de la isla en virtud de una licencia general para establecer relaciones comerciales permitirá que este sector no estatal se expanda, pero más importante aún, dicen, ayudará a EE.UU. y a los cubanos a gozar de una de las libertades y los principios más centrales para el capitalismo: la libertad para ejercer el comercio.