Cerca de 700 inmigrantes podrían haber muerto en el naufragio el domingo de un barco frente a las costas libias, un accidente que si se confirma sería "la peor hecatombe" ocurrida en el Mediterráneo, según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados.
Ante esta nueva tragedia, la Unión Europea anunció que celebraría una reunión de urgencia con sus ministros de Interior y de Relaciones Exteriores aunque no precisó ninguna fecha concreta.
El navío se hundió a unas 70 millas (130 kilómetros) de las costas libias con más de 700 personas a bordo, según explicaron 28 supervivientes rescatados por un barco mercante portugués, indicó a las televisiones italianas Carlotta Sami, portavoz del ACNUR en Italia.
Si estas cifras se confirman, sería "la peor hecatombe jamás vista en el Mediterráneo", declaró la portavoz. Los agentes de salvamento "intentan encontrar a supervivientes entre los cadáveres que flotan en la superficie del mar", afirmó el domingo el primer ministro maltés, Joseph Muscat, durante un mitin político.
Según los guardacostas italianos, se han recuperado hasta ahora 24 cadáveres. Aunque no confirmaron que hubiera 700 personas a bordo, los guardacostas indicaron en un comunicado que la embarcación, de 20 metros de eslora, tenía "capacidad para transportar varios centenares de personas".
Esta nueva tragedia en el Mediterráneo se suma a otros dos naufragios ocurridos la semana pasada, uno de los cuales dejó 400 fallecidos y otro más de 40, según contaron los supervivientes a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y a las ONG.
El barco lanzó una señal de alerta en la madrugada del domingo captada por los guardacostas italianos, que avisaron a un cargo portugués que estaba en la zona. A su llegada al lugar, a unas 120 millas náuticas (220 kilómetros) al sur de la isla italiana de Lampedusa, la tripulación vio al barco zozobrar, según explicaron los guardacostas italianos. Pero, entonces, las personas del navío en peligro se precipitaron todas hacia un lado y eso pudo haber provocado la catástrofe, dijo la portavoz.
Los guardacostas italianos coordinaron un importante dispositivo de socorro de 17 navíos de las marinas de Italia y Malta principalmente, informaron guardacostas italianos y un portavoz de la marina maltesa entrevistado por AFP, quien explicó que la alerta se dio alrededor de la medianoche local (22H00 GMT).
Desde el Vaticano, el papa Francisco instó a la comunidad internacional a actuar con "decisión y rapidez" para evitar nuevas catástrofes y recordó que los migrantes son "hombres y mujeres como nosotros, hermanos que buscan una vida mejor".
Por su parte, el presidente francés François Hollande pidió una reunión urgente de los ministros de Interior y Exteriores de la Unión Europea para hacer frente a la situación.
Con el empeoramiento de la situación en Libia y la llegada del buen tiempo a esta parte del Mediterráneo, el flujo de migrantes que se embarcan en las costas libias para intentar llegar a Europa no para de aumentar. Los guardacostas italianos o los barcos mercantes rescatan una media de entre 500 y 1.000 personas diariamente. Más de 11.000 fueron rescatadas en una sola semana, según los guardacostas.