Los tres grandes vertederos en los que se deposita la basura de La Habana están colapsados, informaron las autoridades de la capital esta semana en medio de una crisis sanitaria en el país por virus como el dengue y el Oropouche.
Están "por encima de los niveles de altura que deben tener", dijo Alberto Ernesto Rodríguez García, director Provincial de Higiene y Comunales.
El funcionario explicó a la prensa estatal que la mayoría de los equipos de recogida están "parados por falta de gomas, baterías y piezas" de repuesto. A ello se suma el déficit de personal para la recogida.
Los municipios con la situación más crítica, precisó, son Centro Habana, Plaza de la Revolución, Playa, 10 de Octubre y Arroyo Naranjo.
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De acuerdo con un informe publicado en julio pasado por Servicios Comunales, La Habana produce 30.108 metros cúbicos diarios de desechos sólidos, más de un 26% de la cantidad promedio que acumulaban en 2023 (23.814).
Un recorrido de la agencia AP la semana pasada por varios barrios capitalinos como Centro Habana, La Habana Vieja —una de las zonas turísticas por excelencia—, Diez de octubre, La Lisa o Lawton mostró enormes vertederos de basura en la mayoría de las esquinas.
“Si pudiera irme para un monte cerca de un río me iría”, dijo a la agencia Elsa Infante, una jubilada de 74 años que se quejó además de la escasez de agua. "Yo viví en el campo y nunca vi la situación que estoy viviendo, una situación pésima”.
La crisis con la basura, que atraviesa la mayor parte de Cuba, está empeorando la trasmisión de enefermedades. La pasada semana el Ministerio de Salud Pública dijo que el Oropouche y el dengue seguían en alza, "con una tasa de incidencia que ha ascendido semana tras semana".
Cifras oficialez indican que desde mayo, cuando se detectaron los primeros casos del Oropouche en Santiago de Cuba, se contabilizaban 12 mil casos sospechosos de esa enfermedad en el país aunque expertos consultados por Martí Noticias consideran que las cifras podrían ser mucho mayores a las que revela el Gobierno, entre otras razones por la falta de insumos para realizar los exámenes.