Lázaro Guerra, director técnico de la estatal Unión Eléctrica (UNE), aseguró esta semana en una entrevista para la agencia EFE que la principal causa de los apagones en Cuba es la falta de combustible, pero que ese es un tema que queda fuera de su “competencia” porque le corresponde a Cuba Petróleo (CUPET).
Cuba recibió recientemente un cargamento de crudo ruso pero el reporte dice que esto no es más que un respiro. “La crisis no ha terminado”, aseguró Guerra, en declaraciones a la prensa extranjera.
Hace apenas unos meses el gobernante Miguel Díaz-Canel explicó que la falta de divisas no les permitía reponerse. "No tenemos… Hoy la divisa apenas nos da para un poco de combustible y la canasta básica".
Con ese panorama, el gobierno insiste en su apuesta por las energías renovables y la producción de crudo nacional. Aunque Jorge Piñón, director del Programa de Energía para Latinoamérica y el Caribe de la Universidad de Texas, considera que la causa de la escasez de combustible es "logística y estructural".
En entrevista para Martí Noticias, Piñón emplazó al director general de CUPET, Nelson Pérez Franco, a explicar qué pasa. "Me gustaría que no la UNE, sino CUPET diera la cara en la televisión cubana. CUPET es quien suministra a la UNE el combustible".
Antes de que llegue el verano, la Unión Eléctrica se ha propuesto dar mantenimiento a dos de sus siete centrales operativas. No obstante, el funcionario aclaró que el "mantenimiento capital lleva dinero. Y evidentemente el país no ha tenido la posibilidad de hacerlo”.
Los cubanos, que a inicios de marzo estuvieron semanas con un promedio de 20 horas de apagones diarios, se quejan constantemente de que la situación es peor en las provincias porque en La Habana los cortes no son tan prolongados.
La capital “tiene un nivel de prioridad”, dijo Guerra y aclaró que en el resto del país “se trata de planificar la afectación en función de la demanda”.
Hace apenas tres semanas cientos de cubanos se lanzaron a las calles en Santiago de Cuba tras varias jornadas con más de 20 horas de apagón.
"Nosotros estamos conscientes que la electricidad es la chispa de cualquier estallido. El presidente decía: la canasta básica, el tema del transporte… Para que haya un incendio tienen que coincidir tres factores: tiene que haber combustible, tiene que haber oxígeno y tiene que haber una chispa. El combustible y el oxígeno estaban ahí: en la falta de alimento, en el transporte, en la falta de combustible… Pero si no hay la chispa, no se enciende", admitió el ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, en referencia a las manifestaciones.
"La electricidad siempre ha sido el detonante ―no solo en Cuba, sino en muchos lugares del mundo― de cualquier protesta, de cualquier manifestación social”, agregó el funcionario.