Las autoridades cubanas demandaron ayuda a países y organismos internacionales ante el agravamiento de la crisis económica y social, por el paso de los huracanes Oscar y Rafael, que han asolado la isla en las últimas semanas.
El jefe del Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Oscar Pérez Oliva-Fraga, informó sobre un encuentro con las agencias del Sistema de Naciones Unidas con oficinas en la isla y "la decisión de estas de liberar fondos monetarios y materiales para apoyar la recuperación en las provincias afectadas".
También anunció la entrega de otros donativos de países y empresas: "Podemos mencionar a países de la región como México, Colombia, Bolivia y Venezuela que de inmediato han dispuesto ayuda para contribuir a la recuperación, y también el caso de Rusia, China y otros países de otras regiones que de forma inmediata han planteado ofrecimientos de apoyo".
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Aumenta la desesperación en la población cubana tras azote de otro huracán
Desde La Habana, el economista Angel Rodríguez Pita dijo el jueves a Martí Noticias que no hay capacidad de respuesta sólida por parte del gobierno para afrontar la situación.
“No hay ahora mismo una movilización por parte de las autoridades para entrar en fase recuperativa. Son los mismos ciudadanos los que en cada uno de sus lugares están haciendo lo que pueden con las herramientas que tienen a mano, como son machetes y demás, pero realmente las capacidades de recuperación van a ir disminuyendo”, afirmó.
Una casa en Alquízar pulverizada por el huracán Rafael
Mientras la tormenta azotaba la costa occidental del país, se produjo una nueva desconexión del sistema eléctrico nacional. Actualmente hay falta de agua potable, de gas licuado y escasez de alimentos y de todo.
"Esto genera una crisis social enorme dentro de este esquema de relaciones que ya se ve afectado grandemente en los últimos meses. Hay que ver la capacidad de respuesta que puede tener la sociedad, pero sobre todo también cómo se va a articular esta sociedad y cómo entonces va a responder también el gobierno cubano ante un fenómeno de crisis agravada, porque tenemos por un lado una tormenta tropical que ha devastado la región oriental y por otro lado, la región occidental, enfrentándose a esta crisis", agregó Rodríguez Pita.
Personas en una parada de autobús se protegen con cartones del viento y la lluvia durante el paso del huracán Rafael en La Habana, Cuba, el miércoles 6 de noviembre de 2024. (Foto AP/Ramon Espinosa)
Además agregó que la ausencia de fluido eléctrico va a impedir "la comunicación entre los distintos actores que han involucrado en la fase de recuperación".
Tras el paso del huracán Oscar, que azotó la región oriental de la isla el pasado 20 de octubre, causando la muerte de al menos ocho personas y daños a 14.300 viviendas y afectaciones en la agricultura, la Organización de Naciones Unidas anunció que entregaría a Cuba 33 millones de dólares para los miles de damnificados en San Antonio del Sur, Imías, Maisí y Baracoa.
En esa ocasión Cáritas Cuba a través de la diócesis de Guantánamo-Baracoa proporcionó alimentos y recursos a las comunidades afectadas en San Antonio del Sur, Imías, Baracoa y Maisí.
(Con reporte de José Luis Ramos para Radio Martí)