La vicepresidenta Kamala Harris ofreció este miércoles su primer discurso tras perder las elecciones el martes contra su contrincante, el republicano Donald Trump, quien superó por amplio margen a la demócrata.
Harris reconoció la derrota electoral y dijo que "seguiremos dando batalla en en las urnas, en los tribunales y en la plaza pública”.
Apuntó al trabajo que harán los demócratas en los próximos cuatro años para enfrentar el segundo mandato de Donald Trump. Y llamó a los jóvenes a organizarse, reconociendo que la derrota puede ser dolorosa pero hay trabajo aún por hacer.
“Sólo cuando está lo suficientemente oscuro puedes ver las estrellas. Sé que mucha gente siente que estamos entrando en tiempos oscuros, pero por el beneficio de todos, espero que ese no sea el caso”, recalcó.
“Nunca me rendiré en la lucha por un futuro donde los estadounidenses puedan alcanzar sus sueños, ambiciones y aspiraciones”, agregó.
La vicepresidenta había llamado horas antes al presidente electo, Donald Trump, para felicitarle por su victoria electoral.
David Plouffe, quien por mucho tiempo fue asesor del expresidente Barack Obama y trabajó en el equipo de Harris, dijo el miércoles que la acción de los demócratas no fue suficiente para vencer a Trump.
“Hemos salido de un agujero profundo, pero no lo suficiente. Una derrota devastadora. Gracias por su lucha, a todos ustedes”, comentó.
Harris, la primera mujer vicepresidenta del país, obtuvo una candidatura directa a la Casa Blanca en julio pasado, cuando Joe Biden se retiró de la contienda electoral y le concedió su respaldo.
La demócrata enfatizó en su campaña la necesidad de fortalecer la clase media estadounidense mediante aumentos salariales, mayor acceso a la educación y reformas fiscales progresivas. También defendió el aborto y mayor acceso a los servicios de salud.
En uno de los temas más relevantes de estas elecciones, inmigración, Harris intentó contrarrestar las críticas de los republicanos al desempeño de la actual administración, argumentando que un acuerdo bipartidista en el Senado que habría incluido estándares de asilo más estrictos y la contratación de más agentes fronterizos, jueces de inmigración y funcionarios de asilo estaba a punto de ser aprobado por el Congreso antes de que Trump se manifestara en contra.
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Kamala Harris nació el 10 de octubre de 1964 en Oakland, California, de padres inmigrantes. Su madre es originaria de la India, y su padre, de Jamaica. Es graduada de Derecho en el Hastings College, de la Universidad de California, en 1989. Tras ser admitida en la Asociación Estatal de Abogados, inició su carrera profesional como Fiscal de Distrito Adjunta en el Condado de Alameda, donde trabajó desde 1990 hasta 1998.
Pasó a ser la fiscal de Distrito de San Francisco en 2003, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar este puesto. Fue reelecta al cargo en 2007, y cuatro años después ascendió al puesto de fiscal general de California, que ocupó hasta 2017.
En 2016, Harris fue elegida senadora de EEUU por el Partido Demócrata.
El de estas elecciones no fue su primer intento de llegar a la presidencia. Se lanzó a la nominación demócrata para las elecciones de 2020, pero no obtuvo el apoyo que esperaba y abandonó la contienda. Harris apoyó la candidatura de Biden, quien la escogió para la dupla presidencial.
Harris y la política hacia Cuba
Harris ha sido cautelosa en declaraciones sobre Cuba. En las más recientes, ofrecidas a Reuters a través de representantes de su campaña electoral, expresó su apoyo al pueblo cubano.
“La vicepresidenta Harris está con el pueblo de Cuba, en su lucha por sus derechos, después de décadas de represión y sufrimiento económico a manos del régimen comunista”, dijo a la agencia británica de noticias Morgan Finkelstein, portavoz de Seguridad Nacional de su campaña..
Tras las protestas multitudinarias que estremecieron a Cuba el 11 de julio de 2021, Harris expresó su apoyo a la autodeterminación del pueblo cubano y respaldó una serie de sanciones contra altos funcionarios del régimen de La Habana, enfatizando la importancia de los derechos humanos.
En 2019, la entonces aspirante a la candidatura presidencial por el Partido Demócrata manifestó que Estados Unidos debería terminar el embargo económico contra el gobierno cubano, según declaraciones de su equipo al Tampa Bay Times.
Luego aseguró, en una entrevista con la agencia española EFE en octubre de 2020, que si ella, entonces aspirante demócrata a la vicepresidencia, y su compañero de fórmula Joe Biden, llegaban a la Casa Blanca, derogarían las restricciones impuestas por el presidente Donald Trump al régimen de Cuba.