El Cardenal Jaime Ortega hablaba por televisión de “reconciliación entre los cubanos” mientras activistas y Damas de Blanco resultaron detenidos antes de llegar a la Catedral cubana
Activistas de derechos humanos y Damas de Blanco resultaron detenidos ayer cuando se dirigían al Oficio de la Pasión al Señor efectuado en la Catedral de La Habana en el primer Viernes Santo después de varias décadas sin considerarse como día de recogimiento para los feligreses de la Iglesia Católica.
Héctor Julio Cedeño, activista de derechos humanos al igual que las Damas de Blanco Ivonne Malleza y Lázara Miján se encontraban en el interior de una celda mientras el cardenal Jaime Ortega, en su inusual transmisión televisiva decía: “Sin perdón no puede haber relaciones interpersonales sanas, ni vida familiar, ni convivencia social, ni reconciliación entre grupos humanos, ni entre pueblos entre sí, pero cuánto nos cuesta perdonar”.
Horas más tarde, una vez concluido el encuentro en la considerada casa de Dios, resultaban liberados los detenidos, al criterio de la líder de las Damas de Blanco otro ejemplo más de “la intolerancia del gobierno cubano”.
El primer Viernes Santo, declarado feriado después de varias décadas en Cuba, constituyó uno de los pedidos de Su Santidad Benedicto XVI al gobernante Raúl Castro en su reciente visita del 26 al 28 de marzo pasados donde también se reportaron una ola de detenciones contra los disidentes y opositores al régimen.
Héctor Julio Cedeño, activista de derechos humanos al igual que las Damas de Blanco Ivonne Malleza y Lázara Miján se encontraban en el interior de una celda mientras el cardenal Jaime Ortega, en su inusual transmisión televisiva decía: “Sin perdón no puede haber relaciones interpersonales sanas, ni vida familiar, ni convivencia social, ni reconciliación entre grupos humanos, ni entre pueblos entre sí, pero cuánto nos cuesta perdonar”.
Horas más tarde, una vez concluido el encuentro en la considerada casa de Dios, resultaban liberados los detenidos, al criterio de la líder de las Damas de Blanco otro ejemplo más de “la intolerancia del gobierno cubano”.
El primer Viernes Santo, declarado feriado después de varias décadas en Cuba, constituyó uno de los pedidos de Su Santidad Benedicto XVI al gobernante Raúl Castro en su reciente visita del 26 al 28 de marzo pasados donde también se reportaron una ola de detenciones contra los disidentes y opositores al régimen.
Your browser doesn’t support HTML5