Omara Ruiz, hermana del biólogo Ariel Ruiz, ha manifestado extrema preocupación por el alcance que en su opinión tiene la Seguridad del Estado en Europa y lo perjudicial que esto puede representar para su hermano quien realiza una huelga de hambre en Ginebra, Suiza.
Desde Pinar del Río, la activista de la sociedad civil independiente hizo conocer a Radio TV Martí el temor de la familia ante una posible acción de la Seguridad del Estado.
Lee también Ariel Ruiz Urquiola: "Uno lo puede perder todo excepto su dignidad"“Desde Cuba, la Seguridad del Estado tiene un poder importante sobre los cubanos que radican en Europa, (la Seguridad del Estado) se mueve con mucha soltura en Europa. De ahí, que Ariel tiene vigilancia permanente de hermanos cubanos que no se separan de él”, comentó Omara, que en 2019 resultó expulsada del Instituto Superior de Diseño de La Habana, donde se desempañaba como profesora, por razones políticas.
Omara asegura que ella y otros miembros de la familia y amigos han tratado infructuosamente de convencer a su hermano a que desista y levante el ayuno.
“Está decidido a mantener la huelga hasta las últimas consecuencias porque no cree en la operatividad de la justicia, tratándose del caso cubano”, dijo Omara.
En este sentido, recordó que desde 2018 existe un pronunciamiento de la Comisión de Detenciones Arbitrarias de la ONU a favor de Ariel y que hasta hoy el gobierno de Cuba no ha respondido ni a una sola de sus demandas.
“Pedía, entre otras cosas, el resarcimiento económico, la restauración de sus fueros profesionales, y todo lo que ha recibido es más acoso por parte del gobierno cubano. Hay que llamar la atención de otras maneras porque el gobierno cubano se burla de la ONU, del Parlamento Europeo y no pasa nada. Si hay un gobierno que goza de total inmunidad en el mundo, es el cubano”, puntualizó la mujer.
Lee también Ariel Ruiz Urquiola, en huelga de hambre frente a la ONUEl biólogo cubano se declaró este lunes en huelga de hambre y sed frente la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones, en Ginebra, para exigir al ente que le permita denunciar lo que considera ha sido un crimen de lesa humanidad que contra él cometió el regimen de La Habana, al inocularle con el virus del VIH.
Ariel Ruiz, activista de la comunidad LGBTQI, hizo la denuncia en noviembre de 2019 durante una visita a Alemania.
“La infestación ocurrió del día 9 al día 10 de mi huelga de hambre, cuando se me impone por el jefe del servicio de medicina interna del Hospital Abel Santamaría (Pinar del Río) una inyección de glucosa concentrada”, aseguró entonces.
Cubanos exiliados que por muchos años llevaron denuncias a las sesiones de la entonces Comisión de Derechos Humanos de la ONU, como el ex prisionero político Angel de Fana; Sylvia Iriondo, de la agrupación Madres en contra de la Represión; y el ex embajador de EEUU ante la referida comisión Armando Valladares, dijeron no tener conocimiento de otro cubano que en los últimos años haya protagonizado una huelga de hambre y sed ante un organismo de la ONU en Ginebra.
“Ariel ha actuado a través de toda su vida a partir de decisiones muy personales. Desde la huelga del 2016 en demanda de mis medicamentos y tratamiento hasta la del 2018. Mi mamá ni yo pudimos convencerlo de que la depusiera”, recordó su hermana.
Lee también Permiten salida a Europa a científico cubano Ariel Ruiz UrquiolaOmara Ruiz, al concluir su declaración, dirigió un mensaje a Michelle Bachelet, Alta Comisionada de los Derechos Humanos de la ONU:
“Que busque en lo profundo de su alma, de su inteligencia y conciencia, y que apele a los supuestos de dignidad y de moralidad éticos en los que una vez creyó cuando era joven y empezaba a enrolarse en la carrera política desde la militancia de izquierda; que vaya a las bases de ese credo ideológico y que piense que su paso por la ONU es transitorio pero va a quedar su legado, la mancha de lo que no ha hecho con el caso cubano, porque tarde o temprano la monstruosidad de Cuba va a salir a relucir como mismo salió a relucir la monstruosidad del régimen nazi y todos aquellos personeros que se prestaron al juego tanto de masacrar como de ocultar los crímenes que tuvieron que responder ante el infalible juicio de la historia”.