El vicpremier de Georgia, de visita en Madrid, expresó su apoyo al nuevo Gobierno ucraniano y explicó que su país ha tratado de reanudar las relaciones culturales con Rusia y recuperar el comercio tras el conflicto del 2008.
El viceprimer ministro de Georgia, Giorgi Kvirikashvili, instó hoy a la Unión Europea y a EE.UU. a que "hagan oír su voz en contra de la invasión rusa" de Crimea e impongan sanciones económicas porque de lo contrario, avisó, "se acabará al final otra vez en una Unión Soviética".
Kvirikashvili hizo estas declaraciones durante su intervención en un desayuno informativo en Madrid, en el que fue presentado por el ministro español de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.
El también ministro georgiano de Economía y Desarrollo Sostenible señaló que la situación en Ucrania es "muy impredecible" ante el referéndum convocado en Crimea el próximo 16 de marzo y que el "riesgo" seguirá existiendo, incluso si Ucrania evita el conflicto militar con Rusia.
Hace casi seis años, en agosto de 2008, Rusia libró en Georgia su primera guerra contra otra antigua república soviética, que terminó con una rápida victoria de las armas rusas y el reconocimiento por parte de Moscú de las independencias de las regiones separatistas de Abjasia y Osetia del Sur.
"Acabaremos al final otra vez en una Unión Soviética", advirtió Kvirikashvili, quien instó a los socios y aliados internacionales a que, para evitarlo, "hagan oír su voz y hablen claramente en contra de la invasión rusa e impongan sanciones económicas". "Si no se imponen sanciones económicas dudo que se pueda frenar a Rusia de seguir en esta situación", subrayó.
El viceprimer ministro georgiano consideró que a menos que la comunidad internacional -la UE y especialmente EEUU- actúen conjuntamente contra "esta invasión" se acabará con "la segregación y la separación de Ucrania" que "ya no podrá ser un territorio unido", lo que será un "precedente negativo de cara al futuro".
"Rusia no se quedará satisfecha sólo con esto y seguirán avanzando. Es una idea absolutamente de locos, de reunificar otra vez la Unión Soviética", dijo, antes de apostillar: "Sin imposición de sanciones no podrá ser frenado". A juicio del viceprimer ministro georgiano, Rusia "sólo entiende un lenguaje: el de las sanciones y el del riesgo a perder dinero". "Sólo con políticas diplomáticas y de mitigar la tensión internacional no bastará", avisó.
Kvirikashvili expresó su apoyo al nuevo Gobierno ucraniano y explicó que su país ha tratado de reanudar las relaciones culturales con Rusia y recuperar el comercio. "Pero esto no quiere decir que vayamos a arriesgar nuestra integridad territorial ni nuestra soberanía", añadió. La comunidad internacional debería hacer "todo lo posible" para evitar la independencia de Crimea ya que si sucede, continuó, "se convertirá en tendencia y será peligroso para todos".
Kvirikashvili hizo estas declaraciones durante su intervención en un desayuno informativo en Madrid, en el que fue presentado por el ministro español de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.
El también ministro georgiano de Economía y Desarrollo Sostenible señaló que la situación en Ucrania es "muy impredecible" ante el referéndum convocado en Crimea el próximo 16 de marzo y que el "riesgo" seguirá existiendo, incluso si Ucrania evita el conflicto militar con Rusia.
Hace casi seis años, en agosto de 2008, Rusia libró en Georgia su primera guerra contra otra antigua república soviética, que terminó con una rápida victoria de las armas rusas y el reconocimiento por parte de Moscú de las independencias de las regiones separatistas de Abjasia y Osetia del Sur.
"Acabaremos al final otra vez en una Unión Soviética", advirtió Kvirikashvili, quien instó a los socios y aliados internacionales a que, para evitarlo, "hagan oír su voz y hablen claramente en contra de la invasión rusa e impongan sanciones económicas". "Si no se imponen sanciones económicas dudo que se pueda frenar a Rusia de seguir en esta situación", subrayó.
El viceprimer ministro georgiano consideró que a menos que la comunidad internacional -la UE y especialmente EEUU- actúen conjuntamente contra "esta invasión" se acabará con "la segregación y la separación de Ucrania" que "ya no podrá ser un territorio unido", lo que será un "precedente negativo de cara al futuro".
"Rusia no se quedará satisfecha sólo con esto y seguirán avanzando. Es una idea absolutamente de locos, de reunificar otra vez la Unión Soviética", dijo, antes de apostillar: "Sin imposición de sanciones no podrá ser frenado". A juicio del viceprimer ministro georgiano, Rusia "sólo entiende un lenguaje: el de las sanciones y el del riesgo a perder dinero". "Sólo con políticas diplomáticas y de mitigar la tensión internacional no bastará", avisó.
Kvirikashvili expresó su apoyo al nuevo Gobierno ucraniano y explicó que su país ha tratado de reanudar las relaciones culturales con Rusia y recuperar el comercio. "Pero esto no quiere decir que vayamos a arriesgar nuestra integridad territorial ni nuestra soberanía", añadió. La comunidad internacional debería hacer "todo lo posible" para evitar la independencia de Crimea ya que si sucede, continuó, "se convertirá en tendencia y será peligroso para todos".