Cierra el diálogo en Nicaragua sin acuerdos en justicia y democracia

Una mujer detenida por participar en la marcha del 16 de marzo que exigía la liberación de los presos políticos en Nicaragua.

El Gobierno y una alianza opositora de Nicaragua culminaron este miércoles la negociación para superar la crisis que estalló hace casi un año, sin alcanzar acuerdos sobre los temas de justicia y democratización.

Durante la última sesión de trabajo, las partes discutieron las propuestas sobre los temas de verdad, justicia, reparación y no repetición, y el de fortalecer la democracia y la institucionalidad, y no alcanzaron consenso.

El jefe negociador de la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, Carlos Tünnermann, dijo en rueda de prensa que solicitaron a los testigos y acompañantes del proceso que convoquen a la continuación de las conversaciones para seguir discutiendo los temas de justicia y de democratización.

Este jueves la presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, manifestó en Ginebra su escepticismo ante las negociaciones recién finalizadas entre el Gobierno y sectores de la oposición, ya que en su opinión "con Daniel Ortega no hay posibilidad alguna de obtener una solución".

El presidente nicaragüense "es una persona que no cumple con su palabra" y que cedió a mantener cierto diálogo "no por convicción sino presionado por la opinión pública y de la comunidad internacional", destacó la dirigente de Cenidh, una de las organizaciones suprimidas por el Gobierno de Ortega en 2018.

Ortega "teme que la Unión Europea, Estados Unidos, el Grupo de Lima o la misma Organización de Estados Americanos le apliquen sanciones, sobre todo económicas contra él y su familia, que se ha enriquecido al amparo del poder y no quiere perder su capital", afirmó la activista en rueda de prensa.

Sobre las negociaciones finalizadas el miércoles -aunque las partes abrieron la posibilidad de que se celebren nuevas rondas- Núñez subrayó que uno de los pocos avances se ha conseguido en la cuestión de los presos políticos, que el Gobierno ha prometido liberar en 90 días, aunque hay divergencias en la cifra de reos.

"El Gobierno se niega a aceptar que existan 802 reos políticos, que es la cantidad que han documentado familiares y el Cenidh, ellos dicen que sólo son 290", recordó.

El Comité Internacional de la Cruz Roja, encargado de elaborar una cifra que concilie las de Gobierno y oposición, presenta una lista alternativa de 647 presos (más otros 150 que ya salieron de las cárceles y están bajo arresto domiciliario), aunque aún no se conoce la reacción del régimen de Ortega a este número.

Núñez consideró por otro lado "una burla" que el Gobierno no acepte el regreso al país de mediadores internacionales como la Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para participar como garantes del proceso de justicia y reparación a víctimas.

El Gobierno "propuso que ese trabajo lo hiciera el subprocurador de derechos humanos (Adolfo Jarquín), lo cual es una ofensa y una falta de respeto porque no tiene las cualidades mínimas para hacerlo", aseguró la presidenta de Cenidh.

A finales de marzo, el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas reunido en Ginebra emitió una resolución contra el Gobierno nicaragüense por su violenta represión de meses de protestas iniciadas el 18 de abril de 2018 por una impopular reforma de seguro social, con más de 300 muertos según los informes de la CIDH.

[Con información de la agencia EFE]