El especialista en animales Ron Magill, un personaje muy conocido en Florida por sus apariciones televisivas en programas como Sábado Gigante, y que también ejerce como director de comunicación del Zoo de Miami, visitó Cuba a principios del mes de abril.
Se trataba de un viaje personal en el que no solo fue al Zoo de La Habana para valorar posibles acuerdos y ver su funcionamiento, sino que se reencontró con las raíces familiares, ya que su padre nació en Cuba y emigró posteriormente a Estados Unidos.
Según informa El Nuevo Herald, Magill entró en La Habana el 7 de abril con un permiso de viaje de intercambio entre los pueblos gracias a las nuevas normas más flexibles para viajar a Cuba desde Estados Unidos. Según reconoce él mismo, cumplía así con un deseo que tuvo durante años, pero que no se había atrevido a materializar por la aversión de Miami al régimen de los Castro y ser un personaje público ejerciendo como portavoz del zoológico del Condado Miami-Dade.
Magill, de 55 años, cuenta que una de las primera anécdotas que vivió en su viaje fue cuando en el Aeropuerto Internacional José Martí un agente le paró y le dijo: "Disculpe, ¿usted es el hombre que sale en Sábado Gigante?"
De regreso a Estados Unidos también declaró sentirse sorprendido por cómo los cubanos son capaces de conocer a personajes de la televisión norteamericana. "Personas que no parecen tener electricidad han visto el programa", dijo Magill. "Había señoras que lloraban. Ellas lloraban porque me habían conocido. Me decían: 'Yo puedo creer que usted esté aquí'".
Sin embargo, una de las reticencias que este famoso personaje tuvo tenía que ver con la postura del Condado y la ciudad de Miami sobre el acercamiento de Estados Unidos con Cuba. Magill dijo sentir "gran inquietud" por ese motivo ya que "hay una facción importante dentro del Gobierno del condado que está en contra de los viajes a Cuba", a lo que añadió que él no "quería herir sus sentimientos. Pero al final, mi profundo deseo de ver dónde nació mi padre prevaleció".
Días después de su regreso, durante una entrevista a la cadena de televisión CBS declaró: "Yo sé que mi viaje allí y mis comentarios van a molestar a la gente". "Me disculpo profundamente por ello". Se refería a frases que dijo como éstas: "Había gente que no tenía zapatos. Pero tocaban música y bailaban". "Las carreteras estaban en bastante buen estado. Ciertamente, no está tan mal como algunos quieren que creas".
Al margen del aspecto personal y mediático de este viaje, Magill visitó junto a otros ejecutivos el Zoológico Nacional de Cuba, de lo que trajo experiencias como las rejas oxidadas y rotas que vio o las historias sin confirmar de granjeros que vendieron caballos moribundos por carne de león.
Sin embargo, también tuvieron buenas palabras para algunas de las cosas que se pueden ver en las instalaciones de La Habana, como la exhibición de África, donde elefantes, hipopótamos o rinocerontes interactúan en un área con césped.