En una escalada de la tensión en la península coreana, Corea del Sur disparó el jueves decenas de rondas de artillería hacia Corea del Norte, luego de que este último estado lanzara proyectiles contra el sur en aparente represalia por los mensajes de propaganda transmitidos a través de altavoces contra Pyongyang en la frontera.
El régimen comunista de Corea del Norte no respondió al fuego, pero advirtió más tarde en una carta que emprenderá acciones militares si Seúl no detiene las emisiones con altoparlantes dentro de las próximas 48 horas, informó el Ministerio de Defensa surcoreano.
La tensión ha aumentado entre las dos Coreas desde principios de este mes temprano cuando explosiones de minas en la zona desmilitarizada (DMZ) de la frontera hirieron a dos soldados surcoreanos. Seúl acusó a Pyongyang de plantar las minas y luego comenzó los mensajes propagandísticos.
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En otra misiva, Pyongyang dijo que está dispuesto a ofrecer una vía para resolver el conflicto, aunque considera las emisiones como una declaración de guerra, dijo el Ministerio de Unificación de Corea del Sur. Un funcionario militar surcoreano aseguró que los mensajes, que comenzaron el 10 de agosto, continuarán.
Seúl reportó que el Norte disparó un proyectil antiaéreo de14.5 mm a las 15:32 hora local (0652 GMT), y después lanzó múltiples disparos con un arma de 76.2 mm a las 16:15 horas. No se informó de daños ni de heridos en el Sur.
La presidenta surcoreana, Park Geun-hye, pidió a sus máximos responsables de Defensa que "reaccionen con firmeza" a las provocaciones del Norte, según citó un portavoz. El Ejército surcoreano, que aseguró que disparó rondas de artillería de 155 mm en respuesta, elevó su estatus de alerta al máximo nivel.
"Nuestro Ejército ha incrementado la vigilancia y está observando de cerca los movimientos militares de Corea del Norte", indicó el Ministerio de Defensa.
El primer proyectil norcoreano cayó en un área situada a unos 60 kilómetros al norte de Seúl, en la parte occidental de la zona fronteriza, dijo el Ministerio de Defensa. Unos 800 residentes cerca de la frontera recibieron orden de evacuar y quedarse en refugios, según funcionarios de la provincia de Gyeonggi y la ciudad de Incheon.
El altercado artillero fue el primero entre las dos Coreas desde octubre pasado, cuando soldados norcoreanos se acercaron a la frontera militar y no se retiraron hasta que Corea del Sur emitió disparos de advertencia.