El embajador de la Unión Europea en Cuba, Alberto Navarro, evitó entrar a fondo en el tema del Decreto-Ley 370, que sanciona a usuarios de internet en la isla, e indicó que la norma "regula las cuestiones de la información, como se hace en muchos otros países".
"Soy de los que piensan que no hay sociedades perfectas. Todos los países del mundo tienen sus luces y sus sombras, y depende de dónde se quiera poner el objetivo", indicó el diplomático en entrevista exclusiva con Radio Televisión Martí.
Lee también UE critica restricciones a las libertades en Cuba y Decreto-Ley 370No obstante, según Navarro, el decreto "ha sido visto por algunos como poniendo obstáculos [sic] o limitando la libertad de expresión".
"Igual que ocurrió con el Decreto 349, en el ámbito cultural, sin dudas se podrá en algún momento, si se estima oportuno, retocar o revisar", apuntó.
Organizaciones como Amnistía Internacional han cuestionado el citado decreto, basándose en que "informar no es delito". Recientemente, Cuban Prisoners Defenders denunció ante el Consejo de Derechos Humanos y el Alto Comisionado de Naciones Unidas la grave situación de la libertad de expresión en Cuba, provocada por la norma legal.
Incluso, la UE, en su Informe Anual sobre Derechos Humanos y Democracia 2019, indicó que el Decreto-Ley 370 ha generado "preocupación," porque "podría usarse para restringir los medios independientes".
Para Navarro, lo más relevante de sus tres años en la isla son los "avances" en las nuevas tecnologías.
"La diseminación de internet antes era algo casi clandestino. Hoy es un derecho del que disfrutan prácticamente todos los cubanos", afirmó.
Diversas campañas ciudadanas han exigido en redes sociales la rebaja de los precios de internet en la isla, considerados prohibitivos para la gran mayoría.
Lee también ETECSA anuncia rebajas para la navegación 4G a precios que pocos pueden pagarLa víspera, la periodista independiente Luz Escobar, una de las promotoras de la campaña #BajenLosPreciosDeInternet, dijo a Radio Televisión Martí que ahora el precio más alto que ofertan es de 45 CUC para 14 GB, algo que "para una persona que está tratando de llevar una empresa o tener una actividad profesional es muy costoso".
La economía, grave
Al embajador de Bruselas en La Habana, que se considera un "observador privilegiado" de la situación cubana, le preocupa la economía y señala a los supuestos responsables: "La pandemia del Covid-19 no ha hecho más que acelerar ese agravamiento. Todo ello, unido a un recrudecimiento del embargo-bloqueo estadounidense, con nuevas sanciones".
De acuerdo con Navarro, él y sus colegas europeos acreditados en La Habana se reúnen periódicamente para seguir "muy de cerca la evolución legislativa" de Cuba.
Lee también Alertan sobre falta de garantías para emigrados que decidan invertir en Cuba"Hemos apreciado los avances que ofrece la nueva Constitución. Esperamos la legislación que la desarrolle. Se ha reconocido la empresa privada. Esperamos que se puedan constituir pequeñas y medianas empresas", deseó.
Sin embargo, en medio de la severa crisis económica, el gobierno de Miguel Díaz-Canel ha mantenido la parálisis en torno al sector privado.
La semana pasada, el informe anual de la Unión Europea derechos humanos y democracia en el mundo aseguró que la libertad de expresión, asociación y reunión en Cuba, en 2019, estuvo "sujeta a importantes restricciones, con informes de numerosas detenciones arbitrarias" y "el encarcelamiento de varios presos de conciencia".
A la pregunta de por qué Bruselas y La Habana no se han reunido de urgencia para tratar dicha situación, el diplomático defendió la permanencia del Acuerdo de Diálogo Político entre ambas partes.
Lee también Cuentapropistas podrán exportar, pero por mediación del Estado"Hemos lanzado cinco diálogos políticos en ámbitos como los derechos humanos, el desarrollo sostenible o las sanciones unilaterales que lamentablemente sufre Cuba desde hace muchas décadas. Todo ello nos permite tener un diálogo fluido y constante con las autoridades cubanas, basado siempre en el respeto", indicó.
No obstante, Navarro aclaró los límites del acuerdo, que no permite a Cuba un acceso preferencial al mercado europeo: "Es un acuerdo de diálogo político y cooperación. En ambos sectores hemos hecho grandes avances y queremos seguir haciéndolos por el bienestar del pueblo cubano".