Las autoridades migratorias cubanas impusieron una restricción de salida del país a la periodista de CubaNet María Matienzo y a su pareja, la activista Kirenia Yalit Núñez.
“Como el mundo se está volviendo a abrir, nosotras fuimos este miércoles a actualizar nuestros documentos y nos encontramos con que estamos ‘reguladas’”, dijo Matienzo a Radio Televisión Martí.
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“No nos coge de sorpresa porque ha habido una sistematicidad represiva sobre nosotras, justo por el trabajo que hacemos, por la campaña ‘Exprésate’. El represor en la última detención que Kirenia tuvo, le advirtió que le iba a cobrar la campaña y yo haciendo periodismo, que denuncia, además, una de las cosas que más le duele al régimen: el tema de los presos del 11J. Y claro que eso nos lo iban a cobrar de alguna manera”, señaló.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares en marzo de 2021 a favor de María Matienzo y Kirenia Yalit Núñez porque determinó que “sus derechos a la vida e integridad personal están en riesgo de daño irreparable”.
La comunicadora añadió que los funcionarios de la Oficina de Inmigración y Extranjería no proporcionaron explicaciones sobre la limitación de movimiento.
“La regulación es otra manera de encarcelarnos dentro de esta isla. No hay mucha diferencia entre una regulación de viaje y un sitio a la casa. La única diferencia es el espacio de movimiento que podamos tener”, indicó Matienzo.
“Es una manera de reafirmarse en su control y en su represión sobre nuestros cuerpos y reafirmarse ellos mismos como dictadura”.
De acuerdo a una recopilación del Instituto Patmos, asentado en Washington, DC., el régimen cubano está violando el artículo 13 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que garantiza la libertad de movimiento, al menos a 250 personas.
Paralela a esta técnica represiva, usa también la expulsión del territorio nacional de sus enemigos políticos.