El “Patriota de Camagüey” se declara en huelga de hambre y sed

El “Patriota de Camagüey” anuncia en una carta, escrita desde la prisión, que se declara en huelga de hambre y sed

El prisionero político Bárbaro Wilfredo de Céspedes Hernández, conocido como el “Patriota de Camagüey”, se declaró en huelga de hambre y sed exigiendo su liberación, en la prisión de Cerámica Roja de Camagüey.

El Tribunal Provincial de Camagüey lo condenó en octubre de 2021 por el presunto delito de “desobediencia”, tras su participación en las históricas protestas del pasado 11 de julio en Cuba. La petición fiscal para el opositor de 58 años es un año y seis meses de encarcelamiento. También solicitaron para él la prohibición de salida del país y la obtención de un pasaporte.

Esta semana su hija, Daymis de Céspedes Sánchez, dio a conocer la noticia de su huelga de hambre y divulgó una grabación en la que se le escucha decirle a los carceleros que se plantaba y que estaba "dispuesto a morir por su libertad”.


También mostró una carta que Céspedes habría escrito desde la prisión, donde explica sus razones para someterse a una huelga de hambre y sed.

“Decidido a exponer mi vida como único y último recurso para demostrar mi inocencia ante el injusto enjuiciamiento al que he sido sometido por el presunto delito de ATENTADO”, declaró el activista.

En el documento, el activista señaló al régimen cubano, específicamente a la Seguridad del Estado y a la Policía Nacional Revolucionaria, como los únicos responsable de su salud.

El opositor reafirmó su inocencia y dijo no arrepentirse de pensar diferente al régimen cubano. “Si mi delito es pensar, expresarme y manifestarme en contra del comunismo, asumo toda responsabilidad”.


“La patria me contemple orgullosa”, concluyó la carta.

Bárbaro de Céspedes permaneció desaparecido durante varios días, luego de ser detenido, en abril de 2021, en la puerta de una iglesia cuando realizó una peregrinación con una cruz de madera que tenía frases patrióticas y el cuerpo pintado con la bandera de Cuba.

En el mes de enero de ese mismo año, el activista fue detenido por la Policía Nacional Revolucionaria en Camagüey por repartir papeles que tenían frases de José Martí.

El 11 de julio de Céspedes transmitió en directo desde sus redes sociales y llamó a los cubanos a derrocar al régimen comunista: “Este pueblo no resiste más. Éste es el momento. Vamos a ponerle fin a esta dictadura sanguinaria, que nos está matando aquí".