Funcionarios mexicanos y estadounidenses discutieron la necesidad de atender el "flujo sin precedentes" de migrantes en la región y la raíz de sus causas, dijo el lunes el embajador de Estados Unidos en México tras una reunión de alto nivel en la Ciudad de México.
México acordó con la delegación estadounidense, encabezada por el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, trabajar en la infraestructura fronteriza "para crear una frontera del siglo XXI entre Estados Unidos y México que mejore la seguridad y facilite el comercio", expresó el embajador estadounidense Ken Salazar en un tuit.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México señaló que un proyecto de cruce fronterizo al este del puerto de entrada de Otay Mesa, llamado Otay II, fue discutido como una "prioridad estratégica".
Por su parte, el Instituto Nacional de Migración de México indicó que había detenido a más de 2.100 migrantes de diversas nacionalidades con destino a Estados Unidos durante el fin de semana, incluyendo mexicanos. Entre otros, había personas procedentes de Cuba, Honduras, Guatemala y El Salvador.
Más temprano, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, escribió en Twitter que su gobierno trató temas laborales y migratorios en la reunión con Mayorkas.
"Seguimos impulsando la cooperación para el desarrollo con justicia y respeto a los derechos humanos", dijo López Obrador.
Aunque la mayoría de los migrantes atrapados en la frontera estadounidense son de Centroamérica, las autoridades están viendo a rusos y ucranianos pasar de México a Estados Unidos, dijo el gobierno de la ciudad fronteriza de Tijuana. Los funcionarios están tratando de apoyarlos repartiendo información en ruso y ucraniano.
Mayorkas se encuentra en México para celebrar reuniones el lunes antes de visitar Costa Rica el martes.
(Reportaje de Cassandra Garrison y Lizbeth Díaz; edición de Bernard Orr, David Gregorio y Sam Holmes)