EEUU reitera a Cuba urgencia de identificar fuente de ataques a diplomáticos

Vista de la embajada americana en La Habana el 29 de septiembre de 2017 tras el anuncio del recorte de personal diplomático.

Hasta que las condiciones no sean nuevamente seguras para su personal en la isla, EEUU no podrá "proporcionar servicios regulares de visado en La Habana", dijo el Departamento de Estado.

Estados Unidos reiteró este jueves al gobierno cubano en una reunión conjunta la necesidad urgente de identificar la fuente de los ataques a sus diplomáticos destacados en La Habana, y garantizar que cesen, dijo el Departamento de Estado en un comunicado.

El tema fue abordado durante el séptimo encuentro Estados Unidos-Cuba, en Washington, D.C, el primero desde que EEUU retiró en septiembre de 2017 parte de su personal en La Habana, tras los ataques que afectaron la salud a varios diplomáticos y sus familiares.

La delegación estadounidense, encabezada por el subsecretario de Estado adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental, John Creamer, señaló que hasta que "no sea lo suficientemente seguro como para integrar por completo el personal de nuestra Embajada, no podremos proporcionar servicios regulares de visado en La Habana", explica la nota de la Cancillería de EEUU.

EEUU también expresó su preocupación sobre la "detención arbitraria de periodistas independientes y defensores de los derechos humanos" en la isla.

Cuba ha negado cualquier conocimiento de la fuente o causa de los incidentes que han enfermado a por lo menos 24 diplomáticos desde finales de 2016, dejando a algunos con daño cerebral. Otros dos diplomáticos que sufren síntomas similares en Cuba fueron enviados la semana pasada a especialistas médicos para su evaluación.

Otros asuntos tratados en la reunión fueron los diálogos bilaterales sobre derechos humanos, la aplicación de la ley, reclamaciones de propiedades confiscadas, seguridad de la aviación civil y migración.

A continuación, el texto íntegro del comunicado emitido por el Departamento de Estado al finalizar la reunión:

Los Estados Unidos y Cuba celebraron la séptima reunión de la Comisión Bilateral en Washington, D.C. el jueves 14 de junio. El Subsecretario de Estado adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental, John Creamer, encabezó la delegación de los Estados Unidos. La delegación cubana estuvo liderada por Carlos Fernández de Cossío, Director General para Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Los Estados Unidos reiteró la necesidad urgente de identificar la fuente de los ataques a los diplomáticos estadounidenses y asegurarse de que cesen. También reiteramos que hasta que no sea lo suficientemente seguro como para integrar por completo el personal de nuestra Embajada, no podremos proporcionar servicios regulares de visados en La Habana. Expresamos nuestras continuas preocupaciones sobre la detención arbitraria de periodistas independientes y defensores de los derechos humanos. Los Estados Unidos reconoce el progreso en la repatriación de cubanos con órdenes finales de deportación de los Estados Unidos, pero enfatizó que Cuba necesita aceptar un mayor número de retornados.

Las delegaciones también examinaron otras áreas de participación que promueven los intereses de los Estados Unidos y del pueblo cubano, incluida la lucha contra la trata de personas; facilitar la seguridad de la aviación civil; cooperación en aplicación de la ley; cooperación agrícola; seguridad marítima y cooperación en búsqueda y rescate; resolución de reclamos certificados; progresar en la comprensión de los desafíos ambientales; y proteger la seguridad nacional y la salud pública y seguridad de los Estados Unidos.

Las delegaciones acordaron celebrar este verano las próximas rondas de las Conversaciones de Migración semestrales y el Diálogo de Aplicación de la Ley. La Comisión Bilateral se reunió por última vez en septiembre de 2017.

Versión del MINREX cubano

El sitio Cubaminrex de la cancillería cubana informó mientras tanto que durante el encuentro "la delegación cubana rechazó el retroceso impuesto por el gobierno de los Estados Unidos en las relaciones bilaterales" y "reiteró que el bloqueo económico, comercial y financiero continúa siendo el obstáculo fundamental para cualquier perspectiva de mejoramiento en las relaciones bilaterales".

Como es habitual la parte cubana consideró "una injerencia en los asuntos internos de Cuba (...) las acciones políticas y diplomáticas promovidas por los Estados Unidos desde el último encuentro de este tipo celebrado en septiembre de 2017" en cuanto al tema de los derechos humanos.

Acerca de los perjuicios a la salud de más de una veintena de diplomáticos estadounidenses, corroborados por especialistas de la Universidad de Pensilvania, la delegación de Cuba dijo que estos "alegados casos de salud" devinieron pretexto para la adopción de nuevas medidas unilaterales que afectan el funcionamiento de las respectivas embajadas, en particular la prestación de servicios consulares de los que dependen cientos de miles de personas".

Reclamó, además, la eliminación de las alertas de viajes emitidas al respecto por Washington que, dijo, "obstaculiza los intercambios científicos, académicos, culturales, religiosos y empresariales, así como las visitas de estadounidenses".

(A pesar de que la mayoría de las categoría de viaje a Cuba autorizadas por el ex presidente Barack Obama han sido mantenidas por la administración Trump, especialistas han pronosticado que 2018 cerrará con una baja de hasta 50% en los arribos de estadounidenses a la isla)

Los delegados del MINREX reconocieron "los avances alcanzados en los compromisos bilaterales en materia migratoria", y expresaron la voluntad "de continuar el diálogo bilateral y de trabajar en los temas de interés común con la implementación activa, sobre la base de propuestas concretas, de los acuerdos bilaterales suscritos como los referidos a protección del medio ambiente, la aplicación y cumplimiento de la ley, salud, agricultura, hidrografía y geodesia, entre otros".

(Con información del Departamento de Estado, la agencia AP y Cubaminrex)