El comienzo de una investigación en el Congreso brasileño sobre supuesta corrupción en la estatal Petróleo Brasileiro S.A. (Petrobras) estalló en un intercambio de gritos el jueves, cuando legisladores acusaron a quienen cabezan la pesquisa de buscar manipular el resultado.
La disputa pone de manifiesto la creciente tensión en el Congreso dos días después que el Fiscal Federal pidiera a la Suprema Corte investigar a 54 personas por su supuesto papel en un gigantesco escándalo de arreglo de precios, sobornos y corrupción política en Petrobras. Entre esas personas habría decenas de legisladores. La lista de las figuras políticas que serán investigadas podría conocerse el viernes.
El griterío del jueves comenzó cuando Hugo Motta, presidente de la comisión parlamentaria que investiga la supuesta corrupción, intentó abrir la pesquisa en Brasilia en una sala de reuniones del Congreso.
Varios legisladores furiosos corrieron hacia el estrado y comenzaron a gritar y agitar sus dedos frente al rostro de Motta, protestando contra la creación de subcomités de investigación.
Motta, de 25 años, miembro del Partido Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) y uno de los legisladores más jóvenes del Congreso, respondió gritando en el micrófono.
"¡Deben mostrarme respeto! ¡Ustedes deben mostrarme respeto!", gritó Motta reiteradamente mientras temblaba de furia y señalaba a sus oponentes. "No abriré la sesión de esta manera", afirmó.
La disputa se debió a la decisión de Motta de crear varios subcomités con sus propios relatores, una medida que algunos insinuaron socavaría el poder del relator principal del comité, Luiz Sergio, miembro del Partido de los Trabajadores al que pertenece la presidenta Dilma Rousseff. Los relatores, debido a que controlan la redacción del reporte final del comité, tienen mucho poder sobre las conclusiones oficiales.
Entre quienes tomaron el estrado había miembros del PT y de uno de sus aliados, el Partido Socialismo y Libertad (PSOL).Tras unos minutos, los congresistas desistieron y continuaron las deliberaciones.
La tumultuosa disputa, que por poco se convierte en una gresca con golpes de puño, también pone de manifiesto el creciente distanciamiento entre el PT y el PMDB –por mucho tiempo el aliado de Rousseff en el Congreso– por las medidas de austeridad que la Presidenta propuso para luchar contra la inflación y revivir la estancada economía.
Motta le concedió una de las posiciones de relator a miembros del opositor Partido de la Social Democracia (PSDB), informó la agencia de noticias online G1.