Payá dijo que se aplica sistemática crueldad a los 75 disidentes condenados a prisión en el 2003 y denunció que las autoridades de las prisiones actúan con “particular sadismo”.
Payá añadió que el daño físico y psíquico que sufren los presos no debe dejar silenciosos e insensibles a los cubanos y a la comunidad internacional.
Denunció que José Daniel Ferrer García, condenado a 25 años de prisión, y Juan Carlos Herrera fueron golpeados recientemente por varios guardias después que fueron forzados a soportar varios días de hostigamiento y humillaciones.
Payá dijo que el miedo y la falta de solidaridad con los presos que sufren por defender los derechos de los cubanos solamente han traído más calamidad y humillación al pueblo.