La exfiscal general de Venezuela Luisa Ortega, destituida por la Asamblea Nacional Constituyente, partió este martes hacia Brasil desde Colombia, adonde había llegado el pasado viernes tras denunciar una "persecución política" del gobierno de Nicolás Maduro, según la oficina de migración en Bogotá.
"El día de hoy salió rumbo a Brasil, la señora Fiscal General de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, quien hizo su correspondiente trámite de emigración ante las autoridades colombianas", señaló el organismo en un comunicado.
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Ortega participará el miércoles en una cumbre de procuradores del Mercosur en Brasilia, horas después de que Caracas anunciara que pedirá su captura internacional.
"Venezuela va a solicitar ante la Interpol un código rojo a estas personas involucradas en delitos graves", dijo Maduro a corresponsales extranjeros, aludiendo a Ortega y su esposo.
El evento "contará con la presencia de la Procuradora General destituida de Venezuela, Luisa Ortega Díaz", señaló la Procuraduría General de la República (PGR) en un comunicado.
La institución dijo que no informaría detalles sobre su llegada, estadía ni el esquema de seguridad previsto para su paso por la ciudad.
"Todo lo que podemos decir es que ella estará en la PGR mañana a las 9 de la mañana (12H00 GMT)", se remitió a decir una asesora de la institución.
Ortega y su esposo, el diputado Germán Ferrer, huyeron de Venezuela rumbo a Bogotá. El lunes el gobierno de Juan Manuel Santos le ofreció protección y asilo, lo que desató las críticas de la cancillería venezolana.
Migración Colombia no confirmó de inmediato si la exfuncionaria salió en compañía de su pareja.
Ortega, una chavista de 59 años que rompió con el gobierno de Maduro, burló la prohibición de salir de Venezuela que le impuso el máximo tribunal dentro de una investigación que le sigue por supuestamente mentir en el ejercicio de sus funciones. Su esposo también está bajo investigación por presuntos delitos de corrupción.
El gobierno colombiano no ofreció otros detalles del viaje de Ortega a Brasil.
El lunes, el presidente colombiano Juan Manuel Santos dijo que su país otorgará asilo a Ortega si lo solicita.
La decisión del mandatario colombiano fue calificada por Caracas como una medida "cínica" que amenaza con deteriorar aún más las tensas relaciones entre las naciones vecinas, en medio de la crisis política, económica y social en Venezuela.
"La fiscal Luisa Ortega se encuentra bajo protección del gobierno colombiano. Si pide asilo se lo otorgaremos", escribió Santos en su cuenta de Twitter.
El expresidente colombiano, Andrés Pastrana (1998-2002) considera que otorgar asilo político a la exfiscal venezolana puede ser importante para Colombia si suministra información sobre "la injerencia de Venezuela y de Cuba en todo lo que fue el proceso de paz en el país".
"Su salida de Venezuela es importante para Colombia porque nos puede permitir contar, por primera vez, con alguien que va a revelar la verdad de las complicidades entre las FARC y el cártel de los soles (formado por generales venezolanos). Porque lo que hay en la actualidad en Venezuela es una narco-dictadura y la que tiene las pruebas es la ex Fiscal. Ojalá las entregue. Es a lo que le tiene miedo Maduro, porque no pudieron destruir las pruebas. Y para Santos también es una papa (patata) caliente. Va tener el temor de dejarla en Colombia y tiene razones para preocuparse porque ella sabe qué tipo de injerencia hubo de Cuba y Venezuela en el proceso de paz de las FARC", dijo Pastrana al periódico El Mundo.
A juicio de Pastrana, Ortega puede ser importante además para Colombia si suministra información sobre una eventual relación entre la guerrilla comunista de las FARC y el denominado "Cartel de los Soles".
"Lo que es claro, lo que hemos conocido y lo que se conoce, es que las FARC es el mayor proveedor de drogas del "Cartel de los Soles", apuntó Pastrana a EFE.
La situación de la exfiscal venezolana Luisa Ortega Díaz, quien llegó a Bogotá junto a su esposo, el diputado chavista Germán Ferrer, es manejada por Colombia bajo estricto hermetismo, al tiempo que crecen las conjeturas sobre su futuro.
La fiscal vinculada antes al chavismo y que en los últimos meses marcó distancia del Gobierno de Nicolás Maduro aterrizó en Bogotá el pasado viernes, en el aeropuerto El Dorado, desde Aruba tras una travesía digna de Hollywood, que, según versiones de prensa, inició en Caracas, prosiguió en las costas de la Península de Paraguaná, en el noroeste de su país, desde donde viajó en lancha hasta la isla caribeña.
Por su parte, el diario español El Mundo expresa que la fuga de la ex Fiscal Luisa Ortega tiene temblando a más de uno.
"Si decide contar lo que sabe, será la garganta profunda que siempre han buscado tanto los opositores al despótico régimen venezolano como los críticos de Juan Manuel Santos. Su profundo conocimiento del Gobierno chavista y su cercanía a Diosdado Cabello pueden resultar claves para destapar las conexiones entre dirigentes políticos, militares, guerrilleros de las FARC y narcotraficantes", apunta el diario.
La exfiscal ahora exiliada de Venezuela reiteró el viernes pasado que Nicolás Maduro está involucrado en el escándalo regional de sobornos que tiene por centro a la gigantesca constructora brasileña Odebrecht, y dijo tener evidencias del caso.
Ortega atribuyó la "persecución sistemática" del Gobierno de Maduro hacia ella y el personal del Ministerio Público a su investigación de los sobornos de la multinacional brasileña a funcionarios del área.
"Es el mayor hecho de corrupción en la región y eso los tiene muy preocupados y angustiados porque saben que tenemos la información y el detalle de todas las operaciones, montos y personajes que se enriquecieron, y que esta investigación involucra al señor Nicolás Maduro y a su entorno", afirmó la jurista.
[Redactado por Armando de Armas con información de la Agencia EFE y El Mundo]