Si algo está necesitando el béisbol en los tiempos que corren es una modernización en muchos de los aspectos que lo conforman. La tecnología y la rápida velocidad con que se vive la vida diaria atenta contra el disfrute del juego.
Por ello es cada vez más urgente hablar sobre su sistema de estadísticas, el cual aleja al espectador por su enrevesada estructura. Encontrar formas de construir promedios de jugadores que resuman otras cifras sería un efectivo método para aligerar lo antes mencionado. Además de acercarnos más al verdadero valor del jugador y su incidencia en la victoria o la derrota.
Aunque aparece en los registros béisboleros desde los años 1980 el promedio OBP (porcentaje de embasados) podría convertirse en unos de esos elementos.
El cubano Yandy Díaz de los Tampa Bay Rays aparece en el segundo lugar, empatado con Brent Rooker, en la tabla de OBP, de todas las Grandes Ligas, con promedio de 441. El natural de Villa Clara solamente es superado por el venezolano de los Marlins de Miami, Luis Arraez con 469.
A pesar de que los números OBP aun no se valoran con la debida importancia a la hora de conocer la efectividad de un jugador a la ofensiva, podemos decir que esta cifra es más significativa que el propio average, pues con ella se conoce la cantidad de veces que el jugador está en base y representa una posible carrera, ya sea por hit, base por bolas o pelotazo.
Las carreras son las que determinan el vencedor o el perdedor dentro de un juego de pelota. A eso le podemos sumar que este elemento es de crucial trascendencia a la hora de evaluar la disciplina del bateador en el home plate y por consiguiente su efectividad en juegos de mayor o menor presión.
Esto cobra mayor importancia para equipos con aspiraciones de ganar campeonatos. Normalmente un pelotero debe tener de OBP de 60 puntos más que de average.
El primera base del equipo floridiano tiene un average de 325 para un OBP de 441, lo que se puede catalogar como excelente para este inicio de temporada. Su compañero cubano de equipo Randy Arozarena aparece en el puesto número catorce con 400, con average de 328.
Estos dos beisbolistas han aportado mucho en la impresionante temporada de los que atraviesan los Tampa Bay Rays, donde aparecen en primer lugar de su grupo y de todas las Grandes Ligas con marca de 29 victorias y siete derrotas.