El general retirado y dirigente opositor venezolano Antonio Rivero salió de la clandestinidad para pedir protección internacional ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Nueva York y denunciar la falta de derechos en Venezuela por parte del Gobierno de Nicolás Maduro.
El militar, sobre quien pesa una orden de captura por parte de las autoridades venezolanas, estuvo escondido durante 11 meses y concedió una entrevista a la Voz de América en la que explica su caso en detalles.
Tropas cubanas en Venezuela
En entrevista con el diario El Nuevo Herald explicó que en caso de un levantamiento militar u otra amenaza para el régimen de Nicolás Maduro, 20.000 de los 100.000 cubanos que se encuentran en Venezuela están listos para velar por los intereses de La Habana y combatir para apuntalar al chavismo.
"Se trata de un personal entrenado como milicia, como combatientes, y ellos son básicamente los que realizan las labores de control de aquellos que fueron obligados a ir a Venezuela", dijo al Herald Rivero.
Ese contingente representaría la mayor fuerza a doblegar por el sector militar en un eventual intento para derrocar al régimen de Maduro, por encima de unos 3.000 jóvenes entrenados en Cuba que forman parte del denominado Frente Francisco de Miranda, y de las milicias y los colectivos paramilitares desarrollados por el fallecido presidente Hugo Chávez, valoró el general.
Rivero, uno de los primeros militares venezolanos en enfrentarse a Chávez por la penetración cubana en los cuarteles, señaló que Cuba tiene conocimientos sobre la operatividad y la ubicación de los sistemas de defensa de Venezuela, gracias a 15 acuerdos de cooperación militar suscritos por Chávez. Así el mandatario "dejó en evidencia su desconfianza sobre la lealtad de los militares venezolanos", acotó en su entrevista con el diario de Miami.
El ex alto oficial también estimó que, al menos hasta el 2010, La Habana mantenía en Venezuela a cerca de 3.700 especialistas de Inteligencia "repartidos en todas las instituciones del país".