La Laguna de la Leche, el mayor lago natural de Cuba, ubicada en la provincia central Ciego de Ávila, registra hoy el máximo de llenado con un acumulado de 130 millones de metros cúbicos de agua, debido a la infiltración de la lluvia que dejó el potente huracán Irma tras su paso por esa zona de la isla.
Antes del azote Irma a la costa norte del oriente, centro y occidente de Cuba, la Laguna de La Leche estuvo muy deprimida por una intensa sequía de más de tres años, y antes del huracán solo disponía de 89,96 millones de metros cúbicos de agua, indica la agencia estatal Prensa Latina.
Pese a que las lluvias de Irma no fueron tan abundantes en Ciego de Ávila, el escurrimiento del agua sumó al lago natural 40 millones de metros cúbicos que tenía de déficit.
En ese espejo de agua desaguan la laguna La Redonda y la presa de Puente Largo, que junto al Humedal Norte de Ciego de Avila, integran un escudo de gran valor ecológico encargado de proteger al manto freático de la penetración salina del mar, explicaron los expertos.
Pero el huracán le dejó estragos a la flora y fauna que habita en el lago, un paraje muy atractivo por su vegetación de mangle, bosques de ciénaga y variedad de animales.
La Laguna de la Leche, que forma parte del sitio Ramsar Gran Humedal del Norte de Ciego de Avila, tomó su nombre de las características de su fondo, compuesto por rocas calizas, margas, arena, turba y otros sedimentos que le dan el aspecto blanquecino al agua.
Este enclave acuífero es un sitio de interés de los visitantes extranjeros que llegan al archipiélago al polo turístico Jardines el Rey, situado a sólo 60 kilómetros de distancia, cuya posición en el litoral norte lo convirtieron en uno de los puntos de mayor impacto de Irma en Cuba.
Este huracán golpeó del 8 al 10 de septiembre a Cuba, donde ocasionó 10 muertos y daños considerables -aún sin cuantificar- a infraestructuras estatales, viviendas, cosechas, el servicio telefónico y especialmente el sistema eléctrico.
(EFE)