A golpes. “Fui arrastrada. Me llevaron hasta una patrulla, pero en el camino me iban dando patadas, me llevaron arrastrada y me iban dando golpes”, así describió la dama de blanco Yamilé Garro Alfonso la detención de la que fue objeto en la mañana de este jueves.
Horas después del arresto, Martí Noticias pudo contactar con Garro Alfonso y la misma explicó como "unos cinco policías, hombres y mujeres", la interceptaron antes de llegar a la sede del movimiento Damas de Blanco, ubicado en el barrio de Lawton, del municipio "10 de octubre", en La Habana.
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“Yo no me había percatado de que ya estaba el operativo policial, y ya justo en la reja de la sede se me abalanzó un oficial de la Seguridad del Estado con cuatro policías uniformados de la PNR (Policía Nacional Revolucionaria)”, señaló la mujer.
Según el testimonio de la disidente, fue llevada a una unidad policial ubicada en la intercepción de las calles Zanja y Dragones, en Centro Habana. Allí intentaron achacarle una acusación por agresión a los policías, “pero el (oficial de la) Carpeta preguntó quién se haría cargo de la denuncia, y como ellos no sabían qué hacer… llamaron a su superior, y este dijo que no, que me liberaran”, detalló la Dama de Blanco.
Garro Alfonso inició en la oposición hace un lustro para exigir la libertad de los presos políticos, y desde entonces ha sido detenida en decenas de ocasiones.
La iniciativa #Todosmarchamos ha contabilizado más de 90 semanas consecutivas en que las fuerzas represivas impiden a las mujeres ir a misa en la iglesia de Santa Rita.
Garro Alfonso está incluida en una lista que la Junta directiva de las Damas de Blanco hizo llegar a Martí Noticias. En la misma aparecen los detalles de 22 activistas multadas por motivos aparentemente desvinculados de las motivaciones políticas como desorden público, deterioro de documento de identidad, impedir la labor de seguridad ciudadana y otras.
¿Qué hay detrás de las multas?
El movimiento femenino ha señalado que las multas son una estrategia del régimen para acorralarlas y disminuir su activismo.
En el mes de febrero del año en curso, al regresar de un viaje a España, las autoridades aeroportuarias en La Habana detuvieron temporalmente a Garro Alfonso. ¿El motivo?: una multa de $800 pesos.
A Garro Alfonso le informaron “que estaba circulada a nivel nacional”, pero finalmente fue liberada sin más implicaciones.
Algunas de las multas impuestas a estas mujeres opositoras ascienden a miles de pesos en moneda nacional, y como se niegan a pagarlas han ido a parar a prisión.
Recientemente la Dama de Blanco Lismery Quintana, madre de dos niños y enferma de Hepatitis B, fue condenada a seis meses de privación de libertad y llevada a una cárcel de mujeres en Sancti Spíritus, al centro de la isla, tras un juicio sumario por el supuesto impago de multas.
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