Un concesionario de autos eléctricos con una subsidiaria en Miami está instando a diplomáticos que residen en Cuba y que enfrentan una escasez de gasolina a que no se preocupen más, en un intento por atraer clientes en la isla caribeña, informó Reuters.
La compañía Premier Automotive Export tiene el autorizo del gobierno de Estados Unidos para vender vehículos a empresas no estatales en la isla, como embajadas yentidades privadas, como parte del proceso de distensión acordado bajo el gobierno del ex presidente Barack Obama.
"Realizamos una oferta especial y estamos distribuyendo el automóvil -un sedán 2016 eléctrico de Nissan, además con un súper cargador- por un valor de 25.000 dólares, incluyendo el envío directo desde Miami al Puerto de Mariel", dijo John Felder, propietario de la subsidiaria de Premier con sede en Islas Caimán Automotive Leasing and Sales Co.
La oferta llega en medio del recorte del Gobierno cubano en las entregas de gasolina de alto octanaje este mes ha provocado que diplomáticos, empresarios extranjeros y cubanos de mejor posición económica esperen en largas filas para rellenar los tanques de sus automóviles.
No está claro cuánto tiempo se extendería la escasez, mientras que el Gobierno no ha comentado sobre la situación.
La mayoría de los cubanos que poseen vehículos, principalmente modelos de la era soviética, usan combustible de menor calidad que los autos con motores más modernos.
Hasta la fecha, Felder ha vendido uno sólo de sus vehículos a la Embajada de Guyana en La Habana, antes de que comenzara la escasez.
El embajador Halim Majeed dijo que su gobierno compró el automóvil como parte de su iniciativa de energía verde, pero que ahora resultó muy útil.
"Tengo suerte y estoy feliz por eso",dijo.
Majeed señaló que otros diplomáticos ya habían mostrado antes interés por su automóvil eléctrico, pero que ahora lo hacían aún más.
"Es natural que cuando uno se enfrenta a un problema, busque formas y medios para superar ese desafío (...) y en esta situación, el vehículo eléctrico puede ayudar a hacerlo", dijo.
Cuba depende de Venezuela, su aliado político actualmente sumido en una profunda crisis, para cubrir alrededor de un 70 por ciento de sus necesidades de combustible, incluyendo petróleo para refinación y reexportación.
Pero los envíos subvencionados del Gobierno socialista de Caracas han caído hasta un 40 por ciento desde el 2014. Los potenciales nuevos proveedores por lo general quieren dinero en efectivo debido a la mala calificación crediticia de Cuba.
Dos de las tres refinerías cubanas han cerrado o han operado muy por debajo de su capacidad durante meses.
El embajador sueco en La Habana, Jonas Loven, dijo que"pensará seriamente" sobre la oferta de Premier la próxima vez que su embajada cambie el vehículo oficial.
"También enviaría un buen mensaje (contra las nocivas emisiones) de CO2 (dióxido de carbono). Desafortunadamente acabamos de comprar un Mercedes nuevo", agregó Loven.
(Información de Reuters)