El boom de los "doramas" (dramas asiáticos) de Corea del Sur, que junto al cine y la música pop componen la denominada "ola coreana", estalló a comienzos de este año.
Después de un reinado de tres décadas, las telenovelas brasileñas han encontrado en las de Corea del Sur un fuerte rival en Cuba, donde estos culebrones sirven de terapia para olvidar, al menos por una hora, los problemas cotidianos.
El boom de los "doramas" (dramas asiáticos) de Corea del Sur, que junto al cine y la música pop componen la denominada "ola coreana", estalló a comienzos de este año cuando la televisión cubana transmitió con gran éxito la teleserie "La reina de las esposas" (2009).
Le siguieron "Mi bella dama" y "Eres bella" (ambas de 2009), "Sueña sin límites (2011) y hace algunas semanas se estrenó "Jardín Secreto" (2010), pero otras 30 están circulando de mano en mano o de computador en computador por toda la isla.
"Son las que más estoy vendiendo en este minuto. Son fáciles de ver y muy divertidas", declaró a la AFP Yosmely Batista, de 21 años, que montó un negocio privado de venta de películas y telenovelas en la pequeña sala de su casa en el barrio de Centro Habana.
"¿Por qué han prendido tan fuerte, teniendo (cubanos y coreanos) idiosincrasias tan distintas? No lo sé. Fíjate que ellos apenas se besan", añadió Batista, que tiene a la venta 60 telenovelas, la mitad de factura latinoamericana (Brasil, Colombia, México), y la otra surcoreana.
Laura, una estudiante de 13 años, explicó a la AFP que tiene en su computador portátil "24 teleseries surcoreanas", de las cuales ha visto nueve, entre ellas "Los chicos son mejores que las flores" (2009), la más demandada entre sus amigos.
"Me encantan, son más cortas y muy refrescantes", resumió Laura. Las telenovelas de Corea del Sur, que siguen un patrón melodramático similar al de los culebrones latinoamericanos, han mostrado un país desconocido a los cubanos, pues La Habana sólo tiene relaciones con Corea del Norte.
El boom de los "doramas" (dramas asiáticos) de Corea del Sur, que junto al cine y la música pop componen la denominada "ola coreana", estalló a comienzos de este año cuando la televisión cubana transmitió con gran éxito la teleserie "La reina de las esposas" (2009).
Le siguieron "Mi bella dama" y "Eres bella" (ambas de 2009), "Sueña sin límites (2011) y hace algunas semanas se estrenó "Jardín Secreto" (2010), pero otras 30 están circulando de mano en mano o de computador en computador por toda la isla.
"Son las que más estoy vendiendo en este minuto. Son fáciles de ver y muy divertidas", declaró a la AFP Yosmely Batista, de 21 años, que montó un negocio privado de venta de películas y telenovelas en la pequeña sala de su casa en el barrio de Centro Habana.
"¿Por qué han prendido tan fuerte, teniendo (cubanos y coreanos) idiosincrasias tan distintas? No lo sé. Fíjate que ellos apenas se besan", añadió Batista, que tiene a la venta 60 telenovelas, la mitad de factura latinoamericana (Brasil, Colombia, México), y la otra surcoreana.
Laura, una estudiante de 13 años, explicó a la AFP que tiene en su computador portátil "24 teleseries surcoreanas", de las cuales ha visto nueve, entre ellas "Los chicos son mejores que las flores" (2009), la más demandada entre sus amigos.
"Me encantan, son más cortas y muy refrescantes", resumió Laura. Las telenovelas de Corea del Sur, que siguen un patrón melodramático similar al de los culebrones latinoamericanos, han mostrado un país desconocido a los cubanos, pues La Habana sólo tiene relaciones con Corea del Norte.