Los tres manifestantes que el 26 de julio pasado reclamaron libertad para el pueblo y el fin de la dictadura frente a la Catedral de Santiago de Cuba fueron arrestados el viernes cuando acudieron al sector de la Policía tras una citación del jefe del lugar.
Los hermanos Alberto y Leonardo Ramírez Odio, y el padre de ambos, Alberto de La Caridad Ramírez, fueron citados por el Jefe de Sector de la Policía en Santiago de Cuba para supuestamente "devolverle algunas pertenencias que les habian sido ocupadas en un registro", pero los dejaron detenidos, confirmó Rafael Odio Vega, familiar de los activistas.
Según el familiar, les dijeron que no fueran con las "manillas que dicen Cambio" pero los opositores no obedecieron.
Luego de la detención fueron trasladados a diferentes áreas policiales de la ciudad y podrían permanecer encarcelados por 72 horas, dijo Odio Vega.
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Declaraciones de Rafael Odio Vega
El pasado 26 de julio, los opositores cubanos fueron arrestados en medio de una protesta en la Catedral de Santiago de Cuba, donde enarbolaron carteles antigubernamentales y gritaron consignas de "¡Abajo Castro!, ¡Abajo la dictadura!". A los tres los mantuvieron en prisión acusados de "desorden público", pero fueron liberados en octubre sin enfrentar juicio.
La noticia de la liberación los sorprendió, puesto que todo el tiempo que estuvieron presos los amenazaron con sancionarlos a cinco años de cárcel.
Todos integran el Comité de Ciudadanos Defensores de los Derechos Humanos en Cuba, y aseguraron que durante los interrogatorios agentes de la Seguridad del Estado los presionaron para que abandonaran el activismo pro derechos humanos.
Los opositores se negaron a aceptar el mandato, y prometieron seguir adelantes con sus actividades.