El acoso y prohibiciones contra periodistas independientes críticos con el gobierno cubano se ha intensificado en los últimos meses, clara señal de los duros momentos que vive la libertad de prensa en la isla.
Henry Constantín, vicepresidente regional de la SIP y director de la revista independiente La Hora de Cuba, dijo a Martí Noticias que las acusaciones contra reporteros independientes, el allanamiento y confiscación de sus medios de trabajo, y la prohibición de salida temporal del país, se han incrementado desde finales de 2016.
A criterio de Constantín, esas negativas y restricciones surgen porque las fuerzas del régimen quieren acallar el notable el crecimiento de la membresía de personas enfocadas en comunicar en medios de prensa alternativos, y en las redes sociales, lo que están sucediendo en el país.
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El comunicador señaló que los que manejan “eso que llaman gobierno cubano" se cansaron de mantener las aparentes reformas de hace unos años, en las que incluyeron el eliminar el trámite de la carta blanca o permiso de salida, y aunque ya no lo exigen, ahora "el MININT impone otras restricciones".
Otra motivación del régimen para coartarles la libertad a los reporteros es el cambio de política del gobierno de EEUU hacia la isla, recordó Constantín.
Amenazas y restricciones en las dos últimas semanas
En lo que va del mes de junio, más de una decena de cubanos, la mayoría reporteros, se vieron imposibilitados de participar en eventos a los que habían sido invitados fuera de Cuba. En algunos casos, las autoridades de Migración les informaron que no conocen los argumentos de la “regulación” contra ellos.
Los periodistas Henry Constantín y Sol García, editora de la revista La Hora de Cuba y colaboradora del portal digital 14ymedio, no pudieron participar en el evento regional SipConnet 2017 (del 21 al 23) al que habían sido invitados, porque sobre ellos pesa una acusación por el presunto delito de “usurpación de la capacidad legal” que según las leyes cubanas les impide viajar fuera del país.
El 22 de junio, el periodista independiente Manuel Alejandro León Velázquez, residente en Guantánamo y colaborador de Radio Martí y Diario de Cuba, fue detenido por la Seguridad del Estado.
Su casa resultó requisada por efectivos policiales, y luego de varias horas de arresto, fue acusado del presunto delito de “usurpación de la capacidad legal, asociación para delinquir y difusión de noticias falsas".
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"Para el concepto de las autoridades el periodista solo es el que escribe para los medios oficiales", dijo León.
Carlos Lauría, Coordinador del Comité de Protección a los Periodistas (CPJ) dijo que la detención del periodista independiente guantanamero habla a las claras del entramado legal obsoleto que tiene Cuba.
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Sobre el incidente también reaccionó el vicepresidente regional de la SIP, quien calificó de "desagradable que otro comunicador haya sido humillado en su vivienda y acusado de un delito absurdo como es el de usurpación de capacidad legal, que solo busca silenciar a la prensa”.
Las acciones contra los comunicadores y los activistas que también suelen reportar en las redes sociales lo que ocurre en Cuba son muestra de los "duros momentos que está viviendo la libertad de expresión en la isla”, concluyó Constantín.
En octubre de 2016, tras el paso del huracán Matthew por la región oriental de Cuba, varios periodistas independientes fueron detenidos cuando intentaban reportar lo ocurrido.
En una nota publicada por el periódico estatal Granma, el gobierno dijo que "no habrá tregua" para los periodistas independientes que operen fuera del control estatal. A la posición de Granma se sumó la Unión de Periodistas de Cuba.
El gobierno cubano mantiene un férreo control sobre los medios de información en la isla. Cualquier publicación al margen del oficialismo que no cuente con la aprobación estatal es considerada ilegal.
(Con la colaboración de Yolanda Huerga)