Imponer un tope a los precios de media decena de productos de primera necesidad en Cuba podría resultar en que negocios privados dejen de venderlos, generando más desabastecimiento, dijeron economistas consultados por Martí Noticias.
Las autoridades cubanas establecieron el lunes tarifas máximas de venta al pollo, aceite vegetal, leche en polvo, salchichas, pastas alimenticias y detergente en polvo. A su vez, las empresas que los importan quedarán exoneradas del pago de impuesto aduanero.
Con la medida, el Gobierno busca reducir la inflación. No obstante, el ministro de Finanzas y Precio, Vladimir Regueiro Ale, reconoció que para ello es necesario aumentar las producciones y lograr una "mayor oferta de bienes y servicios para la población”.
Aunque para algunos cubanos en la calle la medida es favorable, otros consideran que el desabastecimiento podría ser peor.
Lee también Cubanos reaccionan con descontento al tope de precios: "absurdo, indignante, un error garrafal"Para el economista cubano Mauricio de Miranda "cuando se le impone a los vendedores un precio inferior al que se establecería a partir de las condiciones del mercado, y este no resulta remunerativo, podría preferir retirarse del mercado".
"¿De qué manera creen que puedan funcionar las empresas privadas si se le impone un precio e incluso una tasa de ganancia, establecida simplemente a criterio de unos burócratas?, dijo el experto a Martí Noticias.
"Las autoridades cubanas se empecinan en desconocer las leyes de la economía y de los mercados", apuntó y recordó que el sistema de economía centralizada "nunca funcionó adecuadamente".
El profesor y economista Omar Everleny considera por su parte que con estas nuevas normativas el Estado lo que intenta es competir con las Mipymes en la venta de productos.
“La existencia de un comercio creciente por parte de las Mipymes demuestra que el Estado pudiera ser más ágil al reaccionar ante las nuevas realidades del mercado”, dijo el experto en un análisis publicado este miércoles en IPS.
Los precios de las Mipymes, advirtió, "no son superiores a los de las tiendas en MLC. Si siempre tuviesen precios más elevados, los negocios privados solo pudieran competir con el Estado por el hecho de tener tiendas en cada barrio. Sin embargo, no parece ser el caso, por lo que el uso de la etiqueta 'precios abusivos' tendría que ampliarse o modificarse, no únicamente emplearla para referirse a las mipymes".
Everleny describe la cadena de suministros en la que las Mipymes mayoristas, que importan desde el exterior (a través del Estado), pagan los productos en divisas y los comercializan en moneda nacional a los actores económicos minoristas. Estas últimas venden al menudeo... Mientras más participantes haya, más caros serán los productos para el comprador final".
Lee también "Los cubanos tendrán que recurrir a la bolsa negra", dice economista sobre tope de precios al sector privadoSegún datos de la Oficina Nacional de Estadística e Información, el salario medio mensual en las empresas estatales en Cuba ronda los 4.648 CUP, unos 13 USD, según la tasa de cambio del mercado informal.
"El resultado de imponer precios inferiores a los que funcionarían en un mercado normal es la escasez", acotó Miranda.
"¿Es eso lo que pretenden las autoridades cubanas?... Esto ya ha ocurrido en varias oportunidades", dijo y recordó que "no se trata de un error, sino de una muy grave irresponsabilidad política".
Pedro Monreal, otro economista cubano radicado en España, apuntó por su parte en la red social X que lo observamos hoy en Cuba no es una ‘regulación’ estatal efectiva de la actividad privada, sino "una rústica práctica administrativa derivada de la noción de que la ganancia privada debe ser un dato preestablecido y no un resultado del funcionamiento en el mercado”.
Para Ricardo Torres, economista del Centro de Estudios Latinoamericanos y Latinos de American University en Washington, "no hay un debate serio" sobre el tema.
En entrevista para la agencia AP, aclaró que "ninguna medida será efectiva si no pasa por incentivos para la producción nacional –que sustituya las importaciones--, el desarrollo de un sector privado competitivo y la reestructuración de las empresas estatales que no son eficientes".
"Contener la inflación requeriría de una política de ajustes —dejar de lado muchos servicios sociales por ejemplo— al gasto del Estado que el gobierno no podría aplicar sin costos para la población", dijo.
Miguel Alejandro Hayes, economista y colaborador de Martí Noticias, considera que "la aplicación de esta medida demuestra la falta de capacidad y conocimiento de las autoridades cubanas para hacer políticas económicas".
"Continúan enfrascados en un instrumento de regulación de precios que consiste simplemente en fórmulas de ordeno y mando a la vez que desconoce que los precios no solo deben reponer el costo unitario de cada producto. Los negocios privados tienen una serie de costos fijos que deben reponer y por tanto una reducción de su margen de ganancias puede afectar la rentabilidad en general de estos", agregó.