La Comisión Interamericana de Derechos Humanos aseveró que el Estado cubano no ha adoptado acciones para proteger la vida e integridad del prisionero de conciencia de las manifestaciones del 11 de julio de 2021, José Daniel Ferrer, aunque se emitieron medidas cautelares a su favor.
Ante esta situación, la Comisión adscrita a la Organización de Estados Americanos adoptó una Resolución de Seguimiento en relación con Ferrer, y advirtió que está en condiciones inadecuadas de reclusión en Cuba.
En la Resolución, se observa la situación actual de riesgo de Ferrer, quien fue detenido el 11 de julio de 2021 en Santiago de Cuba y confinado en una celda de castigo en agosto de ese año.
A partir de marzo de 2023, se mantuvo bajo largos períodos de incomunicación, precisó la Comisión.
Durante meses, surgieron rumores sobre su fallecimiento, y aunque se confirmó que estaba vivo, su familia permaneció sin acceso a información oficial sobre su bienestar.
La Comisión Interamericana considera que la alegada situación de Ferrer García en Cuba implica un grave y urgente riesgo de daño irreparable a su salud, vida e integridad personal.
Por otra parte, la CIDH declaró que a pesar de la vigencia de medidas cautelares emitidas hace casi 12 años a favor del preso político, el Estado cubano no ha adoptado acciones para proteger su vida e integridad.
En consecuencia, el organismo de la OEA decidió:
-Continuar el seguimiento de las medidas cautelares.
-Requerir del Estado que implemente las medidas necesarias para asegurar que las condiciones de detención de Ferrer se adecúen a normas internacionales.
-Solicitar que el Estado cubano adopte medidas de protección a la salud de Ferrer.
-Requerir al Estado coordinación para que los familiares u otros representantes del preso puedan conocer las condiciones de detención.
-Y requerir del Estado cubano que informe sobre las acciones adoptadas a fin de investigar los hechos que dieron lugar a la situación actual de José Daniel Ferrer.
Ferrer García era el presidente del Consejo para la Transición Democrática en Cuba (CTDC) cuando fue detenido el 11J, al sumarse en Santiago de Cuba al levantamiento popular que tuvo lugar ese día en varias ciudades de la isla. Tras su arresto le fue revocada una sanción impuesta en 2020 de 4 años y 14 días que cumplía sin internamiento.
El prisionero político, distinguido por la Fundación Víctimas del Comunismo con la Medalla de la Libertad Truman-Reagan, entre otras distinciones por su defensa de los derechos humanos en Cuba, ha sido reconocido como preso de conciencia por Amnistía Internacional.
El opositor, su familia, y numerosas organizaciones internacionales han denunciado en reiteradas ocasiones que lo mantienen en una mazmorra de aislamiento, que es víctima de torturas físicas y psicológicas, y que sobrevive sin medicamentos en condiciones inhumanas, crueles y degradantes.