La guerrilla colombiana de las FARC suspendió el cese unilateral del fuego el viernes, después del bombardeo de las Fuerzas Militares en el que murieron 26 insurgentes y anunció que continuará la negociación de paz con el Gobierno en medio de la confrontación.
"No estaba en nuestra perspectiva la suspensión de la determinación del cese al fuego unilateral e indefinido proclamado el 20 de diciembre de 2014 como un gesto humanitario y de desescalamiento del conflicto, pero la incoherencia del Gobierno Santos lo ha logrado, luego de 5 meses de ofensivas terrestres y aéreas contra nuestras estructuras en todo el país", dijo el grupo rebelde en un comunicado.
La decisión de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia se produjo un día después de un bombardeo de las Fuerzas Militares en una zona selvática del suroeste del país en el que murieron 26 guerrilleros, uno de los golpes más fuertes a la insurgencia desde que se inició en Cuba la negociación de paz a finales del 2012.
El operativo militar contra un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) tuvo lugar el jueves en Guapí (Cauca), unos 480 km al suroeste de Bogotá, un bastión de este grupo rebelde. En la operación, en la que intervinieron la Fuerza Aérea, el Ejército y la policía, incautaron una ametralladora, 15 fusiles, siete pistolas y una radio, según medios locales.
En la misma zona, hace poco más de un mes, una emboscada guerrillera dejó 11 militares muertos, un ataque que consternó a la sociedad colombiana, cada vez más desconfiada del éxito del proceso de paz. Las FARC calificó esa emboscada de "defensiva" por las labores de control que los uniformados llevaban a cabo en el área.
Entonces, el presidente Juan Manuel Santos autorizó el reinicio de bombardeos contra la guerrilla, que habían sido suspendidos en marzo en señal de buena voluntad en el marco del proceso de paz, y que este jueves volvieron a golpear duramente al grupo insurgente. "La ofensiva se mantiene hasta alcanzar la paz que ojalá se logre lo más pronto posible!", escribió el mandatario en su cuenta en Twitter.
Desde La Habana, donde este jueves comenzó la trigésimo séptima ronda de diálogos entre el Gobierno colombiano y las FARC, Alape hizo asimismo un llamado a continuar por la senda del diálogo. "La paz es el único camino contra la barbarie. No más muertes sin razón. Lo inteligente es la inteligencia de la paz", afirmó en la red social el jefe guerrillero.
La analista política Laura Gil consideró que lo ocurrido provocará sin duda una crisis y "probablemente un nuevo escalonamiento de la violencia".
Santos, promotor de las conversaciones que se desarrollan desde noviembre de 2012 en Cuba para poner fin a más de 50 años de conflicto armado, busca acelerar el proceso de paz con recientes incorporaciones en el equipo negociador del Gobierno y un recambio en el ministerio de Defensa, que asumió el exembajador en Washington, Luis Carlos Villegas.
Hasta ahora, las partes han alcanzado acuerdos parciales en reforma rural, participación política y drogas ilícitas, pero faltan por consensuar el tema de las víctimas, el desarme y fin del conflicto, así como el mecanismo para refrendar un eventual pacto final.
El conflicto armado colombiano, en el que además de las guerrillas han participado paramilitares, ha dejado al menos 220.000 muertos y más de seis millones de desplazados, según cifras oficiales.