El torpedero cubano Erisbel Arruebarrena (Cienfuegos, 1990), quien sólo ha jugado 90 juegos en el béisbol profesional estadounidense, 22 de ellos en las Grandes Ligas, estaría siendo observado por los Dodgers para desempeñar esa posición, porque existe la posibilidad de que su paracorto regular, el dominicano Hanley Ramírez (agente libre), decida buscar fortuna en otro equipo.
Los Dodgers le hicieron una oferta de $15.300 millones a Ramírez, es decir, por debajo de los $16 millones que ganó en la recién concluida temporada y habría que ver si él acepta menos dinero por sus servicios.
Ramírez comenzó a jugar con los Dodgers en 2012, pero ha estado fuera de la alineación varias veces, debido a lesiones en un tendón de una de sus piernas, el pulgar y el hombro. En dos temporadas con Los Ángeles, Ramírez bateó para .299 con 43 jonrones y 172 carreras impulsadas.
En Grandes Ligas, Arruebarrena tuvo 41 turnos al bate, con 8 hits (1 doble) y 4 carreras impulsadas. Su promedio de bateo fue de .195 y se ponchó 17 veces.
En las Menores jugó con cuatro equipos y bateó para .259, con 32 carreras impulsadas, 13 dobles, 4 triples y 6 jonrones.
Pero Arruebarrena no es el único torpedero que está en la mira de los Dodgers, también le han echado el ojo al venezolano Miguel Rojas (Venezuela, 1989), quien en 149 visitas al home con Los Ángeles ha conectado 27 imparables, con 1 cuadrangular, 9 impulsadas y 28 ponches para un promedio de .181.
En septiembre de 2013, Arruebarrena intentó sin éxito abandonar Cuba. Fue capturado y le impidieron participar en la 53 Serie Nacional de Béisbol. Sin embargo, dos meses después sí logró su objetivo y estableció residencia en Haití. Poco después, comenzó a entrenar en República Dominicana, donde fue observado por los cazatalentos de las Grandes Ligas.
La página digital baseball-reference.com señala que el pelotero firmó en 2014 como agente libre con los Dodgers por 5 años y $25 millones. Su debut en las Mayores fue el 23 de mayo.