Congresistas estadounidenses al tanto del caso del opositor José Daniel Ferrer y abogan por la intervención de organizaciones como la ONU y la OEA para su liberación.
El congresista estadounidense Mario Díaz-Balart señaló la importancia de estar pendientes del opositor José Daniel Ferrer detenido hace ya más de dos semanas en Versalles, sede de la seguridad del Estado en Santiago de Cuba.
“Es un héroe que ahora la comunidad internacional ha notado, un héroe que ahora todo el mundo está velando, está vigilando para ver qué hace el régimen de Castro y para garantizar que su seguridad y su salud sean protegidas y que no le suceda algo, porque lo único que él está haciendo es pidiendo por la libertad de todo el pueblo cubano”, declaró el congresista por La Florida al periodista, Ricardo Quintana, de Televisión Martí.
José Daniel Ferrer, quien preside la Opositora Unión Patriótica en el oriente del país, fue condenado en la Primavera Negra del 2003 como miembro del Grupo de los 75. Luego de ser liberado en el 2011, bajo la figura de la licencia extrapenal, estuvo entre los 12 opositores que se negaron a ser deportados a España como condición para su excarcelación, en las negociaciones entre la Iglesia Católica cubana y el gobierno.
José Daniel Ferrer García fue arrestado nuevamente, junto a su esposa Belkis Cantillo, el 2 de abril con violencia por la policía política, tras un registro en la vivienda que comparten en Palmarito de Cauto. Ella quedó en libertad bajo investigación mientras que su esposo permanece arrestado.
“En mi opinión, es menester seguir el caso para evitar que la vida de Ferrer corra peligro”, enfatizó Díaz-Balart.
El congresista reiteró que existe en Washington el apoyo para lograr la excarcelación del opositor cubano, así como los esfuerzos para lograr una transición democrática en la Isla.
“Nosotros en el Congreso, de una forma bipartidista por cierto, apoyamos a esos héroes en Cuba, apoyamos la causa de la libertad del pueblo cubano”, dijo.
La esposa de Ferrer, declaró a Radio Martí en días pasados que las autoridades cubanas lo mantienen en prisión provisional y lo acusan de organizar marchas de protestas en los municipios santiagueros, Palmarito de Cauto y Palma Soriano, además de recibir dinero de Estados Unidos para subvertir el orden interno.
Según Belkis Cantillo, las autoridades comunistas amenazaron con reactivar la causa del opositor del 2003.
El congresista David Rivera también se pronunció sobre el arresto de Ferrer y admitió que se trata de otro caso de una persona “valiente que está dispuesta a arriesgar todo, su vida, su libertad, su familia para desarrollar la democracia dentro de Cuba y creo que debemos a hacer todo para apoyarlos” dijo a Radio Martí.
Por su parte, la congresista Ileana Ros-Lehtinen abogó por el apoyo de grupos de prestigio mundial para exigir la libertad de Ferrer.
“Amnistía Internacional, Freedom House y muchas otras organizaciones van a ayudar. Ojalá que las Naciones Unidas ayude, ojalá que la OEA ayude. Estas son instituciones que fueron creadas para aliviar el sufrimiento y para promover democracia y libertad, deben ayudar a Ferrer”, agregó Ros-Lehtinen.
“Es un héroe que ahora la comunidad internacional ha notado, un héroe que ahora todo el mundo está velando, está vigilando para ver qué hace el régimen de Castro y para garantizar que su seguridad y su salud sean protegidas y que no le suceda algo, porque lo único que él está haciendo es pidiendo por la libertad de todo el pueblo cubano”, declaró el congresista por La Florida al periodista, Ricardo Quintana, de Televisión Martí.
José Daniel Ferrer, quien preside la Opositora Unión Patriótica en el oriente del país, fue condenado en la Primavera Negra del 2003 como miembro del Grupo de los 75. Luego de ser liberado en el 2011, bajo la figura de la licencia extrapenal, estuvo entre los 12 opositores que se negaron a ser deportados a España como condición para su excarcelación, en las negociaciones entre la Iglesia Católica cubana y el gobierno.
José Daniel Ferrer García fue arrestado nuevamente, junto a su esposa Belkis Cantillo, el 2 de abril con violencia por la policía política, tras un registro en la vivienda que comparten en Palmarito de Cauto. Ella quedó en libertad bajo investigación mientras que su esposo permanece arrestado.
“En mi opinión, es menester seguir el caso para evitar que la vida de Ferrer corra peligro”, enfatizó Díaz-Balart.
El congresista reiteró que existe en Washington el apoyo para lograr la excarcelación del opositor cubano, así como los esfuerzos para lograr una transición democrática en la Isla.
“Nosotros en el Congreso, de una forma bipartidista por cierto, apoyamos a esos héroes en Cuba, apoyamos la causa de la libertad del pueblo cubano”, dijo.
La esposa de Ferrer, declaró a Radio Martí en días pasados que las autoridades cubanas lo mantienen en prisión provisional y lo acusan de organizar marchas de protestas en los municipios santiagueros, Palmarito de Cauto y Palma Soriano, además de recibir dinero de Estados Unidos para subvertir el orden interno.
Según Belkis Cantillo, las autoridades comunistas amenazaron con reactivar la causa del opositor del 2003.
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El congresista David Rivera también se pronunció sobre el arresto de Ferrer y admitió que se trata de otro caso de una persona “valiente que está dispuesta a arriesgar todo, su vida, su libertad, su familia para desarrollar la democracia dentro de Cuba y creo que debemos a hacer todo para apoyarlos” dijo a Radio Martí.
Por su parte, la congresista Ileana Ros-Lehtinen abogó por el apoyo de grupos de prestigio mundial para exigir la libertad de Ferrer.
“Amnistía Internacional, Freedom House y muchas otras organizaciones van a ayudar. Ojalá que las Naciones Unidas ayude, ojalá que la OEA ayude. Estas son instituciones que fueron creadas para aliviar el sufrimiento y para promover democracia y libertad, deben ayudar a Ferrer”, agregó Ros-Lehtinen.
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